"Este espacio ha pasado de ser un búnker bancario a ser un búnker de datos". Benjamí Rovira, especialista que lleva desde el año 1996 trabajando en el mundo de las telecomunicaciones, define así Oxigen Data Center, una compañía que almacena grandes cantidades de datos en la comarca del Vallès. El experto hace prácticamente tres décadas que se inició en el mundo de las telcos y el año 2020 vio el gran potencial que tenían estos centros de procesamientos de datos.
Con la finalidad de ofrecer un servicio de alojamiento, procesamiento y distribución de información, el emprendedor decidió alquilar un centro de 6.000 metros cuadrados de superficie en Sant Cugat del Vallès que anteriormente había sido gestionado por CaixaBank. "Era un espacio en desuso, con muchas posibilidades y decidí reformarlo", comenta Rovira, que añade que la remodelación costó unos 10 millones de euros que fueron aportados por él mismo y por la sociedad inversora de la familia Salicrú. En la hoja de ruta de la compañía está llegar a los 25 millones de euros de inversión para seguir creciendo tanto en equipamientos como en servicios. "Era un espacio muy envejecido y hemos conseguido actualizarlo y queremos que así continúe".
Oxigen, que cuenta con un centenar de clientes, presta servicios en el sector farmacéutico, industria, tecnológico y universitario, entre otros, y recientemente ha cerrado un acuerdo para llevar a cabo un proyecto con el apoyo de los fondos europeos. "Somos un negocio con mucha recurrencia, los contratos son de entre 36 y 48 meses y prestamos servicio a todo tipo de sectores", reconoce. Con respecto a la facturación, cerraron el año 2023 con 6,2 millones de euros y ahora tenemos previsto crecer un 30%, aproximadamente.
Tres ejes de negocio
El modelo de negocio de la empresa, que arrancó hace poco más de un año, se basa en tres ejes: el alquiler de espacios para que los clientes puedan instalar su propia infraestructura, la gestión del centro de datos de manera híbrida (en el centro de Oxigen Data Center y a la oficina del cliente) y el cloud privado. De hecho, de los 6.000 metros cuadrados, la mitad están destinados a las conocidas como salas blancas y el resto a espacios técnicos, que está donde van los 700 rack, las cañerías de climatización de las máquinas, los cuadros eléctricos o los grupos de electrógenos, entre otros.
Con respecto a la tercera rama, hace un tiempo Rovira llegó a un acuerdo con el grupo Mediapro porque tenía un centro de datos denominado MediaCloud que querían vender. "Lo adquirimos en nuestra cartera, nos quedamos con esta pata del negocio y su talento, que estaba formado por una treintena de personas," recuerda al emprendedor. Actualmente, el equipo de Oxigen Data Center está formado por una cincuentena de profesionales y asegura que "cuesta" encontrar este talento por la falta de especialización. "Talento y buenos profesionales tenemos, pero todavía necesitamos más".
Inteligencia artificial y sostenibilidad
Sobre la irrupción de la inteligencia artificial, Rovira apunta que es una "ola que nos pasará en todos por encima" y que ellos ya lo aplican para prestar el servicio a sus clientes. "Utilizamos la IA en un entorno seguro, con una potencia eléctrica idónea y con una climatización adecuada", indica, y agrega que la potencia que necesitan para dar servicio a esta computación también va relacionada con la inteligencia artificial. "Utilizamos una maquinaria muy potente, disponemos de 6 MW de potencia total y 20 kW potencia máxima/rack, aquí tenemos muy buena conectividad", argumenta. Además, cuentan con suministro eléctrico de dos subestaciones diferentes, que les asegura el máximo nivel de seguridad eléctrica. Y todo eso sin dejar de lado la sostenibilidad, ya que el 100% de la energía consumida por el centro de datos procede de energía renovable.
Finalmente, sobre el ecosistema de los data centers, el emprendedor señala que la inmediatez y la proximidad son "fundamentales" y que hoy en día están surgiendo nuevos actores dentro del mercado. "En Catalunya hay pocos, pero van aflorando. Son inversiones elevadas, hay que saberlas explotar y el mercado tanto público como privado tiene que percibir el trabajo que haces y como la haces". Aparte, reclama más tracción por parte de las administraciones y más apoyo por parte de los políticos catalanes. "Somos apolíticos, pero los centros de datos que conozco en el territorio cuentan con poca huella catalana", acaba.