El retorno a una cierta normalidad en la movilidad después del gran paro del año 2020 a causa de la pandemia del coronavirus, comportó durante el año 2021 también el aumento de atropellos, aunque todavía muy por debajo de los datos del 2019. Este hecho, sumado al exponencial aumento de los desplazamientos en bicicleta y especialmente en Vehículos de Movilidad Personal (VMP) -principalmente, patinetes eléctricos- de los últimos años, han comportado que cada vez más estos vehículos se vean implicados en atropellos. Así, según datos avanzados por 'La Vanguardia' este lunes, bicicletas y patinetes eléctricos fueran los causantes de un 40% de los atropellos.
En concreto, y según datos facilitados por el mencionado medio a partir del recuento provisional de la Guàrdia Urbana de Barcelona de accidentes de tráfico del 2021, en la capital de Catalunya hubo 614 atropellos, de los cuales 246 fueron causados por bicicletas y patinetes, es decir, un 40,06%. Dicho de otra manera, cuatro de cada diez. Con respecto a la cifra total, cabe decir que supone el aumento en un centenar de atropellos con respecto al 2020, pero que, con todo, queda bastante lejos de la registrada en el 2019, antes de la pandemia, cuando este tipo de siniestros llegaron a la cifra de 1.147.
Con respecto a los 246 atropellos, se reparten prácticamente en dos mitades, 122 en bicicletas implicadas y 124 por VMP, una definición que agrupa los patinetes eléctricos con otros vehículos como los 'hoverboard', los 'segway' y los 'airwheel'. En todo caso, en la inmensa mayoría de estos 124 atropellos el VMP implicado era un patinete eléctrico, de largo el más utilizado en la actualidad. A modo comparativo, en 2021 los turismos provocaron 139 atropellos, mientras que las motocicletas causaron 121. Todo ello hace que porcentualmente, bicicletas y patinetes sumen más atropellos que los turismos (un 40% delante de un 22,6%).
Mano dura de la Guàrdia Urbana
La Guàrdia Urbana de Barcelona no es ajena al incremento de la siniestralidad causada por VMP. El pasado noviembre la policía local de Barcelona ya anunció su intención de perseguir con mano dura las conductas inapropiadas en la conducción de este tipo de vehículos, ante un importante aumento de la siniestralidad durante el 2021. Tal como detalló el inspector Jordi Oliveres, a finales de 2021 ya se habían recogido 18.000 infracciones por parte de usuarios de VMP e insistió en que sus conductores tenían la obligación "de estar informados de la normativa". "Un usuario tiene que saber que no puede ir por la acera, como tiene que saber que no puede saltarse un semáforo en rojo", añadió Oliveres.
De hecho, el desconocimiento de la normativa es uno de los principales problemas con que se encuentran los usuarios de patinetes eléctricos. Según detalló el informe 'El comportamiento de los usuarios de vehículos de movilidad personal (VMP) en Barcelona', presentada por el RACC en septiembre, hasta un 51% de los usuarios del patinete eléctrico desconocen la normativa aplicable en aspectos como el uso de elementos de seguridad —casco e iluminación—, que son recomendables u obligatorios según el tipo de patinete, la prohibición de llevar pasajeros y, sobre todo, los espacios donde pueden circular —la acera está prohibida excepto en caso de que pase el carril bici— y a qué velocidad.
En este informe, el exceso de velocidad es uno de los principales problemas detectados. En concreto, un 19% de usuarios admiten superar la velocidad permitida, que no puede ser nunca de más de 25 km/h, y un 9% confiesan que tienen el vehículo trucado para poder exceder la velocidad permitida. El dato más preocupante es el caso de circulación en carril bici sobre acera, donde la velocidad está limitada a 10 km/h —mientras que en carriles bici en calzada se puede correr hasta 25 km/h-. Según el informe, un 94% de usuarios exceden este límite. Conviene decir, además, que la circulación en acera del patinete eléctrico está prohibida excepto en el caso que pase el carril bici.
Juicios a la vista
Además, el aumento del uso de los VMP y, como consecuencia, de la siniestralidad, no ha pasado por alto tampoco a Seguridad Vial, que ya en verano dictó un oficio a todas las policías locales del Estado español para perseguir los conductores de patinetes que infrinjan la ley de seguridad vial. Desde entonces, la fiscalía de Barcelona y su demarcación ha recibido un aumento de atestados policiales donde se denuncian a conductores de patinetes. Se prevé que los primeros juicios contra ellos se celebren a en marzo o en abril. Un cambio importante con respecto a la situación hasta ahora, donde desde la fiscalía de Barcelona, como la mayoría, se archivaban las denuncias menos graves contra conductores de patinetes ante la falta de una normativa clara.