La exalcaldesa de Barcelona, Ada Colau, prevé quedarse en Barcelona, al menos a corto y medio plazo, y ha descartado ser candidata a las elecciones europeas del próximo mes de junio. Además, tiene previsto reunirse el próximo jueves con el alcalde, Jaume Collboni, con quien no se habría encontrado desde el pasado noviembre y a quien ha reprochado "gestos de complicidad" con Xavier Trias de cara a formar un gobierno municipal que, para la líder de los comunes, tendría que ser de izquierdas y progresista. Así lo ha explicado Colau este sábado por la mañana en el marco de una entrevista al programa 'El Suplement' de Catalunya Ràdio, donde ha asegurado que su intención es seguir trabajando por la ciudad: "Yo me quedo por Barcelona. Seguiré trabajando por la ciudad en el cargo que sea. No iré a Europa", ha afirmado.

De hecho, Colau ha insistido que su objetivo es seguir trabajando por la ciudad, pero ha evitado dar por hecho que, en el caso de cerrar un acuerdo de gobierno con Collboni, en el cual ha incluido una vez más a ERC, la exalcaldesa pasara a ejercer el cargo de primera teniente de alcaldía de quien fue, precisamente su primer teniente de alcaldía como jefe. "Es un sí a Barcelona, me quedo por la ciudad y por un proyecto de transformación", ha insistido Colau sin ir más allá, además de señalar que también había renunciado al cargo de ministra, tal como se le habría propuesto desde su propio espacio político.

Colau, que ha asegurado que todavía falta mucho tiempo para decidir el nombre de la candidata o candidato de Barcelona en Comú para las elecciones de 2027, ha insistido en la necesidad de trabajar en el presente, indicando que en la reunión prevista para el jueves, propuesta "por las dos partes" y circunscrita en la "relación normal de un alcalde con los jefes de grupo", planteará la necesidad de formar un gobierno de izquierdas. Ahora bien, ha reiterado que todavía no ha habido ningún encuentro a tres bandas entre PSC, BComú y ERC y ha lamentado "los gestos de complicidad" de Collboni con Trias y ha dicho que eso quiere decir "mirar a la derecha y una visión de ciudad más conservadora".

Por eso, aunque Colau sigue defendiendo la necesidad de articular una coalición tripartita de gobierno en Barcelona, ​​ha confesado una cierta decepción ante el comportamiento de Collboni: "La última reunión fue en noviembre, después nos hemos cruzado en actos, pero no ha habido un contacto regular", ha explicado, para añadir que "lamento decirlo, decepciona un poco". De hecho, la exalcaldesa ha recordado que su partido votó a Collboni en la investidura como alcalde "como mal menor" y para "evitar que Junts desmonte los cambios que hemos hecho estos años", para descubrir ahora que el PSC parece estar cerca de cerrar un acuerdo con Trias por Barcelona.