La celebración en el recinto del Park Güell de un desfile de la firma Louis Vuitton supuso una afectación muy importante para los alumnos de la escuela Baldiri Reixach, situada dentro del recinto modernista. Por eso, la asociación de familiares de alumnos (AFA) ha presentado una queja a la Sindicatura de Greuges de Barcelona donde se protesta por las molestias que originó el desfile, se critica la presencia policial "intimidatoria" en un entorno escolar y el uso indebido del espacio público y se reclama que no se vuelva a cerrar el Park Güell para un acto privado así como que se reduzca la presión turística sobre el recinto de Antoni Gaudí, patrimonio mundial de la humanidad según la UNESCO.
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Según ha adelantado 'Betevé', las familias de la Escola Baldiri Reixac consideran que se ha hecho una "legislación especial para la empresa Louis Vuitton", ya que según la normativa del mismo parque está prohibido circular en bicicleta o patines por el recinto, pero, en cambio, se permitió la entrada de camiones y cochecitos de golf para trasladar a los invitados. Asimismo, también se recuerda que está prohibida "toda actividad que implique el deterioro de los elementos monumentales", cuando durante los preparativos se estropeó un muro de contención y unas escaleras de la plaza de la Natura -la plaza central del parque- y se autorizó el desfile en otro de los puntos emblemáticos del recinto, la sala hipóstila.
Críticas al despliegue policial
La misma queja, siempre según el medio citado, recuerda que la normativa solo permite actividades artísticas o musicales en casos excepcionales y con finalidades no lucrativas mientras que para la AFA, aunque el desfile se pueda considerar un caso "excepcional", en ningún caso se puede considerar que tenía finalidades no lucrativas, sino todo el contrario. Además, se critica el despliegue policial que comportó la celebración del desfile, con agentes de la BRIMO, los antidisturbios de los Mossos d'Esquadra, haciendo tareas de control de entrada y salida del parque con armas largas. Según la AFA se llegó a exigir documentación y practicar registros a algunas madres y padres de los escolares. Finalmente, también se cuestiona la actuación policial "contundente" contra los manifestantes que se concentraron para mostrar el rechazo al desfile.
Factura de 3.552 euros por los desperfectos
Hay que recordar que en los preparativos del desfile de Louis Vuitton se estropearon elementos patrimoniales, que el Ayuntamiento de Barcelona atribuyó a "un error humano durante las tareas de montaje". La reparación del muro y las escaleras ha tenido un coste de 3.552 euros, abonados por Louis Vuitton.