El gran número de obras con que Barcelona ha llegado a este final de mandato ha tenido como rebote el hecho de que desde hace unos meses no paran de aparecer restos arqueológicos, como ha pasado gracias a las obras en la Rambla, los ejes verdes o la Via Laietana. En este contexto, unas obras en la avenida del Paral·lel, justo al lado del único tramo que pervive de la muralla moderna, han aflorado nuevos restos, en concreto correspondientes al desaparecido Baluard del Rei, una fortificación que se construyó en los siglos XV y XVI como complemento y refuerzo ante los ataques de artillería.
Según ha adelantado Betevé este martes por la mañana, ha sido gracias a las obras de una nueva red de agua en la avenida del Paral·lel, en el tramo inferior, donde están las Drassanes y el paseo Carner, que han aparecido restos de este baluarte, que fue demolido en 1890 en el marco de una reurbanización que permitió abrir hasta el mar la avenida del Paral·lel. Siempre según el medio citado, se ha encontrado un tramo de muro de unos cuatro metros de largo y unos dos de alto, hecho de sillares de piedra de Montjuïc. De hecho, el usuario de Twitter @historiesdebcn ya había apuntado hace unos días la posibilidad de que los restos se correspondieran al desaparecido baluarte. Como es habitual en estos tipos de hallazgos el Servei d'Arqueologia Municipal documentará los restos que seguidamente se volverán a cubrir.
Como siempre, habrá que esperar a los arqueólogos para saber qué han encontrado. ¿Por|Para la ubicación, podrían ser vestigios del antiguo Baluarte del Rey?
— Historias de Barcelona (@historiesdebcn) June 9, 2023
Fue uno de los últimos tramos de la muralla derribados. En la foto se ve el inicio de los trabajos de demolición, el año 1890. pic.twitter.com/yBBKn4v7SM
El Baluard del Rei fue una construcción imponente situada en uno de los extremos de la muralla, adosada al recinto militarizado de las Drassanes. Según recoge el blog especializado Barcelofilia, este baluarte formaba un saliente de la línea de la muralla que permitía una mejor defensa de la ciudad en caso de ataque exterior y era el espacio ideal para concentrar las piezas de artillería. Fue demolido en 1890, y estaba situado en el espacio que ahora ocupa la plaza de las Drassanes, también llamada de la Carbonera, y convivió durante un periodo de dos años con el recientemente construido monumento a Cristobal Colon.
Primavera arqueológica en Barcelona
Este hallazgo se tiene que sumar a las que ha habido en diferentes puntos de Barcelona que conforman casi una primavera arqueológica por el volumen y constancia con que aparecen restos. Justo muy próxima, y en el marco de las obras de reurbanización de la Rambla, se localizaron restos del antiguo cuartel de las Drassanes, mientras que en la Via Laietana y también en el marco de una reforma urbanística, hace pocos días que se descubrieron dos esqueletos en un complejo de tumbas romanas y tardoantiguas. En el Eixample, los ejes Verdes también han comportado la recuperación de adoquines y antiguas vías de tranvía, así como los restos de una masía.