El teniente de alcaldía de Prevención y Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, ha sostenido, en vísperas de la Mercè, que Barcelona es "una ciudad segura" donde las agresiones con arma blanca se pueden producir "esporádicamente". En una entrevista este viernes por la mañana en Catalunya Ràdio, el responsable de seguridad del consistorio ha hecho un llamamiento a "disfrutar" de la fiesta mayor de Barcelona admitiendo, eso sí, que en unos días de celebración que acabarán congregando más de un millón de personas "es pura estadística que pueda haber una situación de conflicto". Asimismo, ha recordado que habrá un despliegue específico para las fiestas de controles preventivos y aleatorios con palas detectoras de metal.
De hecho, se prevé que estos controles se intensifiquen en aquellos lugares donde hay programados conciertos multitudinarios, como la playa del Bogatell, la plaza Catalunya o la Zona Universitària. Además, el teniente de alcaldía Batlle ha remarcado que habrá hasta 5.000 agentes de Guàrdia Urbana y Mossos d'Esquadra en el dispositivo de seguridad durante los cinco días de la Mercè, que considera, según recoge la ACN, una cifra "muy mesurada" para conseguir que la fiesta mayor esté presidida por la seguridad.
Armas blancas, tema generalizado por todo el Estado
Asimismo, Batlle ha insistido que el problema de las armas blancas no afecta solo a Barcelona, sino que es un tema generalizado por todo el Estado español y también en puntos de Europa y ha apuntado que las agresiones acaban siendo "afortunadamente pocas", a pesar de lamentar que a menudo aparecen en entornos de aglomeraciones, peleas, fiesta y muy vinculadas al consumo de alcohol. Batlle ha recordado también que han pedido varias veces modificaciones legislativas para atacar el problema, aunque ha lamentado que las que se han llevado a cabo hasta ahora no han obtenido los resultados deseados. Por otra parte, ha considerado "exagerado" relacionar turismo con delincuencia y ha recordado que en la reunión que mantuvieron el alcalde Jaume Collboni y la consellera de Interior, Núria Parlón, también se habló de la necesidad de que haya "una mayor visibilización" de los agentes uniformados en la calle.
Por último, y al ser preguntado sobre el hecho de que cámaras de la Zona de Bajas Emisiones de Barcelona captaran el vehículo en lo que se habría desplazado el president Carles Puigdemont en agosto, Batlle se ha limitado a decir que se hizo esta visualización y que se pasó la información a los Mossos d'Esquadra. "A mí me consta que se visualizó en un espacio concreto de Barcelona, los túneles de la Rovira, y se puso en conocimiento de los que estaban haciendo la investigación", ha declarado.