El Reial Automòbil Club de Catalunya (RACC) ya ha advertido en varias ocasiones al Ayuntamiento de Barcelona de los peligros de congestión del tráfico que se producirán con la avalancha de obras que han empezado ya o están a punto de empezar los próximos días. De hecho, el mismo día que han dado inicio las obras de transformación de la Via Laietana y a una semana que empiecen las de conexión del tranvía por la avenida Diagonal, el RACC ha insertado un anuncio en varios medios de comunicación donde hace una seria advertencia a la alcaldesa de Barcelona, las obras no pueden parar la ciudad.
Estos anuncios, en algún caso a página entera, el RACC apunta que aunque hay que mejorar la calidad del aire", la previsión de más de veinte actuaciones de gran alcance en la vía pública en el periodo 2022-2030, "aumentarán la congestión y la contaminación y empeorarán los desplazamientos diarios dentro de un área donde residen 5 millones de personas". En este sentido, esta institución reclama que los ciudadanos "tienen derecho a conocer las consecuencias de las medidas que se están adoptando" y por eso reclaman "priorizar las obras de transporte público", "incrementar la inversión" y, sobre todo, "consensuar y redefinir el resto de actuaciones que no son de transporte público y que afectan la movilidad".
Veinte actuaciones urbanísticas
En este sentido, el RACC recopila hasta veinte actuaciones urbanísticas que marcarán la movilidad en los próximos años, una decena de las cuales tienen que ver con los accesos a Barcelona y la otra con obras dentro de la misma ciudad. Entre las primeras mencionan, entre otros, la rótula de la Torrassa y la integración de vías en l'Hospitalet, los soterramientos de vías en Sant Feliu de Llobregat y Montcada i Reixac, el carril Bus-VAO de la B-23, el carril bus de la C-31 en Badalona y el túnel de Glòries en sentido Llobregat y las estaciones ferroviarias barcelonesas de la Sagrera y Sant Andreu Comtal.
Con respecto a las "actuaciones que afectan a la movilidad dentro de Barcelona", el RACC alerta sobre las restricciones que comportan o comportarán obras como las de la avenida Meridiana, la Via Laietana, la Rambla, la calle Pi i Margall, los ejes verdes del Eixample, el tranvía Glòries-Verdaguer, el acceso ferroviario a la T1 del aeropuerto del Prat, la conexión Espanya-Gràcia de los FGC y el tramo central de la L9 del metro así como la prolongación de la L4 entre La Pau y Sagrera. Todo ello, una recopilación de la avalancha de obras que Colau ha puesto en marcha cuando queda un año y poco más para las próximas elecciones municipales, previstas para mayo del 2023.