La plaza de Sant Jaume vivirá un tercer año sin belén, al menos del tipo de tradicional y/o alternativo que se había podido ver en el centro de Barcelona otros años. En 2021 no lo hubo a causa de las restricciones de la pandemia -aunque hubo protestas por su ausencia- y en 2021 el Ayuntamiento de Barcelona optó por una "intervención artística" que finalmente resultó fallida. Ante este panorama, este 2022, el gobierno municipal ha apostado por un belén tecnológico que tomará la forma de videomapping interactivo, eso sí, sin ningún tipo de figuritas tangibles en la plaza y, por razones obvias, solo en horario de tarde-noche.
Esta instalación virtual, diseñada por Onionlab, se podrá ver en la fachada del Ayuntamiento de Barcelona a partir del 16 de diciembre y hasta el 5 de enero, en horario de inicio de 17:30 h y hasta las 22 h o las 23 h según los días, es decir, que durante toda la mañana y primera hora de la tarde no habrá nada que ver -excepto el árbol de Navidad en uno de los rincones de la plaza- en Sant Jaume. El teniente de alcaldía de cultura, Jordi Martí, ha quitado importancia a este hecho apuntando que en otros años "también era en el horario de tarde cuando había más público" y recordando que en los belenes "la luz siempre les da más espectacularidad, eso también pasa con los que hacemos en casa".
Este pesebre digital será interactivo, ya que el público podrá, a través de los teléfonos móviles y por medio de códigos QR, proponer cambios de escenas o incluir su propio nombre de pila -siempre que salga en la base de datos del INE- a las figuritas del belén. Entre las escenas que se podrán ver en las proyecciones de videomapping habrá elementos tradicionales, como el mercado de Santa Llúcia, las luces de Navidad, el belén, el tió, l'home dels nassos, la gastronomía tradicional y los Reyes de Oriente, adaptados al calendario festivo -el tió se podrá ver hasta Sant Esteve, cuando será sustituido por los Reyes de Oriente.
"El belén siempre genera polémica"
Con un presupuesto de unos 100.000 euros -la mitad de lo que costó el del 2021-, el belén de este 2022 aporta, según Martí, una nueva posibilidad: "El belén siempre genera polémica pero no había pasado nunca de que se pudiera trastear", ha afirmado el responsable de Cultura, que ha invitado "a todos los barceloneses a poner su propia huella". Eso sí, a partir del día 16, mucho más tarde que en otras ocasiones. En este sentido, Martí ha afirmado que la voluntad de este año ha sido "acercarlo a las fechas más tradicionales del belén", que también era cuando "había más presencia de gente". En todo caso, queda para ver la reacción de la ciudadanía ante una plaza pública vacía en que solo empezará a tener actividad al anochecer, a partir de las cinco y media de la tarde.
La Nochevieja incluirá un espectáculo de drones
En cuanto a la celebración de la Nochevieja, volverá a tener lugar en la avenida Maria Cristina, con un espectáculo de la compañía provenzal Groupe F, que tendrá dos partes y combinará luz, pirotecnia, música, agua y, como novedad, más de 200 drones, todo ello con un mensaje que versará sobre la paz, para poner fin a un año en el que ha estallado una guerra en Europa. Según ha explicado Martí, con la celebración y las tradicionales campanadas se buscará "celebrar el hermanamiento entre pueblos y ciudadanos". En la primera parte se evocarán diferentes culturas del planeta y en la segunda se hará una metáfora de la comunicación del hombre con el cosmos. Cada parte tendrá una duración de doce minutos.
La cabalgata, más arrabalera que nunca
En cuanto a la cabalgata, la principal novedad será el cambio de itinerario, ya que por obras en Via Laietana no subirá por esta vía, aunque el gobierno municipal espera poder recuperar el trazado habitual cuando acaben las obras. En vez de subir por la Via Laietana y atravesar la plaza Catalunya, pujará por el Paral·lel, lo que la acercará al Raval, que será protagonista porque la cabalgata incluirá la escenografía de la ópera participativa La Gata Perdida, protagonizada por entidades vecinales del Raval en colaboración con el Gran Teatre del Liceu. Otras novedades serán las nuevas carrozas de los Reyes Magos, de veinte metros de largo, y el retorno al reparto habitual de caramelos, con siete toneladas previstas.