El Ayuntamiento de Barcelona ha emitido este miércoles la orden de precinto del Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de la Zona Franca, y plantea llevar a los tribunales al Ministerio de Interior por incumplimiento, según ha anunciado el teniente de alcalde Jaume Asens.
Junto al gerente de Recursos, Joan Llinares, Asens ha explicado que, tras esta orden de precinto, el CIE tendrá dos meses para abandonar las instalaciones, y ha defendido que la orden de cese de julio es firme porque el Ministerio no la recurrió, pero el equipamiento sigue en funcionamiento.
Esta orden es el trámite administrativo imprescindible antes de que el Ayuntamiento pueda llevar lo que ve un caso de incumplimiento de la normativa municipal a los tribunales, en concreto a la Audiencia Nacional.