La caravana de motos que el domingo por la tarde atravesó Barcelona después de celebrarse en l'Hospitalet de Llobregat el acto solidario de la Papanoelada Motera no será sancionada, aunque finalmente sí que hubo grupos de motoristas que entraron en la capital de Catalunya. Aunque el mismo gobierno municipal confió en que no hubiera ninguna caravana y apuntó que serían sancionadas todas las vulneraciones de las normas de circulación, fuentes municipales han apuntado este lunes a ElNacional.cat que no consideran que la marcha motorista del domingo fuera una concentración como tal, razón por la cual no habrá sanción específica por hacer una marcha sin pedir el permiso preceptivo.
De hecho, al Ayuntamiento de Barcelona no le constan sanciones específicas a ninguno de los integrantes, pero sí que se ha señalado que los motoristas provenientes del acto de l'Hospitalet entraron a Barcelona de manera muy dividida y sin entorpecer la circulación, y apuntan que en caso contrario, se habría levantado acta y se habría entregado a los Mossos d'Esquadra. Hay que tener en cuenta que la posibilidad de una caravana motorista por las calles de la ciudad fue cuestionada tanto por la Sindicatura de Greuges de Barcelona como por entidades vecinales del Eixample, que incluso organizaron una manifestación de protesta para impedir el paso de los motoristas. Por su parte, las organizadoras del acto benéfico se desvincularon de las acusaciones del defensor del pueblo de Barcelona.
De hecho, la misma manifestación, que contó con la participación de una veintena de personas que cortaron la confluencia de la Gran Via con la calle de Llançà con una pancarta con el lema 'Prou Papanoelada Motera a Barcelona' solo consiguió que la Guàrdia Urbana desviara preventivamente el tráfico antes del túnel de la plaza de Espanya, de manera que los motoristas esquivaron la protesta para continuar el recorrido por el Paral·lel y seguir por otros puntos céntricos de la ciudad. Previamente, el gobierno municipal aclaró que no se había concedido ningún permiso de ocupación de la vía pública para este acontecimiento ni había recibido ninguna comunicación por parte del Departamento de Interior que se hubiera convocado alguna marcha en las calles de la ciudad de Barcelona. Finalmente, el consistorio resta importancia a la situación y considera que no hubo ninguna caravana de motos con suficiente entidad como para sancionarla.
2.000 motoristas en l'Hospitalet
La marcha por Barcelona en moto se produjo después de que más de 2.000 motos participaran en la Papanoelhada Motera de l'Hospitalet de Llobregat, donde se recogieron juguetes para familias necesitadas. Después del encuentro, organizado por la Associació de Dones de Sant Josep, una parte de los motoristas se dirigió a Barcelona, aunque desde la organización del acto solidario se desvincularon de la marcha.