El Ayuntamiento de Barcelona ha decretado una suspensión de licencias de nueva construcción y de planes urbanísticos durante un año para preservar y proteger el patrimonio de la Villa de Gracia y parte de los barrios de la Salud, Vallcarca, y Camp d'en Grassot y Gracia Nueva.
El plan especial de preservación urbanística y protección del patrimonio tiene el objetivo de conservar la singularidad de estos ámbitos, donde desde los años 60 se ha producido una progresiva desaparición del tejido tradicional.
Es por este motivo que el gobierno municipal cree necesario intervenir para estudiar las condiciones de la edificación para garantizar el mantenimiento de los valores del tejido antiguo. Y para definir unas intervenciones que preserven el patrimonio construido característico de estos barrios, fomenten y estimulen la rehabilitación y el mantenimiento, y finalmente, eviten la sustitución de las casas y construcciones que hay actualmente.
En esta línea, el Ayuntamiento ha iniciado los trabajos para redactar el documento urbanístico que contenga estas estrategias. Este documento llega un mes más tarde que los vecinos de Gracia detuvieran el derribo de dos casas centenarias del barrio que son propiedad de una inmobiliaria.