Cuando quedan catorce meses para las próximas elecciones municipales, previstas para mayo del 2023 y a pesar de las quejas continuadas por el cúmulo de obras que se están llevando a cabo en estos momentos, con el peligro de que no se acaben antes de los comicios y, por lo tanto, hipotequen su continuidad a un eventual cambio de gobierno municipal, la administración barcelonesa no tiene intención de frenar a la espera de lo que salga de las elecciones. Al contrario, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, parece dispuesta a exprimir al máximo el mandato y aprovechando al máximo los plazos. El ayuntamiento ya ha anunciado que en otoño empezarán unas nuevas obras, las de transformación de la avenida Meridiana en el sector entre Navas de Tolosa y Felip II, con previsión de finalizar en verano de 2024.
La intención del ayuntamiento es que este mes de mayo finalicen las obras en el tramo actual en transformación, entre la calle de Mallorca y las calles Navas de Tolosa - Josep Estivill, y sin perder comba ya ha adelantado que pasado el verano se seguirá trabajando desde el punto donde finalizan las obras hasta la calle de Felip II, un tramo corto, de menos de cuatrocientos metros de longitud, que en todo caso sirve para asegurar que los trabajos continúen más allá de las elecciones. Todavía hay más, según ha anunciado la segunda teniente de alcaldía, Janet Sanz, el objetivo es que "la avenida Meridiana deje de ser una autopista" y por eso ha detallado los siguientes pasos previstos.
Así, en paralelo a la fase final del tramo actualmente en obras y la preparación del inicio de un nuevo tramo, el consistorio trabaja ahora en el proyecto final entre Felip II y Fabra i Puig con el horizonte de poder tenerlo terminado entre 2023 y 2024, es decir, ya en el siguiente mandato, sin abandonar, además, el proyecto de hacer llegar la transformación hasta el puente de Sarajevo ni renunciar, en un futuro, de hacerlo llegar hasta el puente de Vallbona, ya prácticamente en el límite del término municipal de la capital catalana. Con estas obras, la voluntad es que la Meridiana "se parezca más a una calle y no a una autopista".
¿Cómo será el nuevo tramo?
En la intención del ayuntamiento de convertir la Meridiana en un "eje ciudadano" y una vez finalizado el tramo actual, las obras avanzarán en sentido Sant Andreu, lo cual significará afectar al tráfico, con un carril de circulación menos por sentido, de manera que en cada lado habrá dos para la circulación general y uno para buses y taxis. En medio habrá una mediana central de 9,50 metros de anchura, con el carril bici segregado de doble sentido, de 4,30 m; un parterre de 2,60 m a cada lado con una hilera de árboles grandes e iluminación. De esta manera, el carril bici que hay ahora en las aceras se habrá eliminado para incorporar grandes parterres en torno a los plátanos existentes combinados con espacios de estancia.
Con respecto a los desplazamientos a pie, a las intersecciones con las calles de la Nació, Trinxant (lado mar), Múrcia y Palència se habrá hecho una acera pasando en forma de plataforma única con prioridad para el peatón. Habrá nuevos pasos de peatones para mejorar la conexión transversal de la Meridiana, y se habrá modificado la posición de la mayoría de los que había hasta ahora para proyectarlos en dirección a los ejes de las calles que atraviesan la avenida y mejorar los itinerarios. También se habrá incorporado una referencia al Rec Comtal con la colocación de dos chapas de acero con las letras recortadas en el punto exacto de la avenida por donde pasaba.
Menos carriles para el vehículo privado
Además, las actuaciones implicarán reducir un carril de salida en el tramo València-Mallorca, ya que la primera reforma lo dejó en cuatro de salida y tres de entrada. De esta manera se conseguirá que la Meridiana tenga dos carriles para el tráfico general y uno para buses en cada lado desde Glòries hasta Navas de Tolosa-Josep Estivill. Para poder seguir las obras a continuación de este tramo, el gobierno municipal aprobará inicialmente al principio de abril en Comisión de Gobierno el proyecto ejecutivo del tramo que va de Navas de Tolosa-Josep Estivill hasta Felip II. Según el calendario previsto, los trabajos empezarán en otoño próximo y estarán terminados en verano de 2023.
Se dará continuidad en la sección de la nueva Meridiana, con dos carriles para el tráfico general y uno para buses por lado, las bicicletas por el centro con carril bici segregado, aceras más anchas y más arbolado y parterres. La novedad será a la llegada a la plaza de Ferran Reyes y los Jardines de Maria Soteras, donde el espacio central se ensanchará y se convertirá en una rambla amplia que mejorará el paseo, la transversalidad y la conectividad entre lado y lado de la avenida, a su paso por el barrio de Navas. En este punto el carril bici se dividirá y será unidireccional a ambos lados del espacio central.
El nuevo espacio para peatones de Navas es uno de los ejes de transversalidad que se han identificado en la Meridiana. Son zonas que concentran una mayor densidad de peatones y ciclistas y, a la vez, tienen un gran potencial de conexión entre los barrios. Hoy día ya hay uno en el cruce con las calles de Aragó-Rogent-Rec Comtal, que cose el antiguo eje del Clot y el Camp de l'Arpa del Clot, y se proyectan más en el barrio de la Sagrera, en el ámbito de las calles del Cardenal Tedeschini, Pegaso, Antilles y Olesa; y en el barrio de Sant Andreu, a la altura del paseo de Fabra i Puig.
El cambio que habrá vivido la Meridiana con el conjunto de las obras hechas entre el mandato pasado y el actual será muy importante. Desde la plaza de las Glòries hasta Felip II, se habrá actuado a lo largo de 1,7 km de la avenida, que supondrán hasta 94.000 m² de superficie renovada. Y se habrá ganado unos 560 árboles nuevos y unos 10.000 m² de parterres y especies arbustivas. La inversión total habrá sido de 28,4 millones de euros, de los cuales seis provienen de los fondos Next Generation, de manera que los objetivos de la transformación son avalados por la Unión Europea.
Próximo objetivo, Fabra i Puig
Con respecto a la continuación de la reforma, una vez se haya llegado a Felip II el siguiente tramo a abordar será hasta Fabra i Puig. Paralelamente, este otoño se empezará a redactar el anteproyecto de la siguiente parte de la Meridiana, desde Fabra i Puig al Pont de Sarajevo, que se acompañará de un proceso participativo para recoger las propuestas y aportaciones vecinales y de entidades del entorno. La transformación de la Meridiana se suma a las actuaciones hechas o en marcha en la plaza de las Glòries y entornos, la calle Gran de Sant Andreu y el avance de las obras de las estaciones de la Sagrera y de Sant Andreu, el Pont de Santander y las urbanizaciones de su entorno.