El paseo de Gràcia de Barcelona acoge algunas de las obras más importantes del modernismo catalán, como las casas Batlló y Milà de Gaudí, la Lleó Morera de Domènech i Montaner y la Amatller de Puig i Cadafalch. Menos conocido, hay otro edificio de corte modernista en su vertiente neogótica— que justo ha acabado un largo periodo de rehabilitación. De hecho, quien haya paseado los últimos ocho años por la parte baja del paseo se habrá acostumbrado a la presencia de una gran marquesina en el lado Besòs que cubría un edificio en obras y que, después de tanto tiempo, casi formaba parte del paisaje.

Casa Pascual y Pons / Foto: Carlos Baglietto
Una batalla medieval forma parte de la ornamentación de una chimenea original de la casa que ahora ha sido cambiada de ubicación a raíz de la rehabilitación. Se duda de que originalmente fuera funcional / Foto: Carlos Baglietto
Casa Pascual y Pons / Foto: Carlos Baglietto
Vitrales originales de la Casa Pascual i Pons situados en el vestíbulo, con la reproducción de una escena cotidiana de la edad media dentro de toda la ornamentación de corte neogótico del edificio / Foto: Carlos Baglietto

Una vez retirada la marquesina y los andamios, los barceloneses y visitantes del centro de la ciudad ya pueden disfrutar otra vez de un "nuevo" edificio modernista, la Casa Pascual i Pons, en los números 2 y 4 del paseo de Gràcia. Entrecomillar el apelativo nuevo tiene su razón de ser, porque aunque se trate de un edificio construido entre 1890 y 1891, la rehabilitación ha sido tan integral que casi se trata de una construcción nueva, eso sí, respetando al máximo todo su legado patrimonial. El estudio de arquitectura Espinet + Ubach ha sido el encargado del proyecto por encargo de la aseguradora Catalana Occidente, propietaria del inmueble, que lo dedica a alquiler de oficinas. De hecho, buena parte del edificio está ocupado por la multinacional Apple, que tiene su principal tienda en Barcelona justo delante, en el paseo de Gràcia número 1.

Un poco de historia

Sebastià Pascual y Alexandre Pons, que a pesar de los diferentes apellidos eran familiares, encargaron al arquitecto Enric Sagnier Villavechia la construcción de dos casas residenciales que visualmente forman un solo edificio. Sagnier, "el quinto arquitecto del modernismo" según el arquitecto Miquel Espinet, que junto con Josep Perramon han sido los artífices de la rehabilitación, apostó por construir una construcción que "pivota entre el neogótico y el modernismo neoclásico", con rasgos que lo singularizan como las barbacanas que simulan tejados a dos aguas o los dos torreones con pináculos de cerámica. De hecho, los dos torreones merecen un comentario aparte, porque durante la época dorada de las remontas porciolistas fueron desmontadas con la intención de hacer crecer el edificio, pero la operación se detuvo y fueron recuperadas posteriormente.

Casa Pascual y Pons / Foto: Carlos Baglietto
El arquitecto Miquel Espinet, de Espinet + Ubach, explicando a los medios los principales ejes de la larga rehabilitación de la Casa Pascual i Pons, edificada por Enric Sagnier / Foto: Carlos Baglietto

Sagnier, que entraría en el top 5 del modernismo tras Domènech i Montaner, Puig i Cadafalch, Gaudí y Jujol —según el orden mencionado por Espinet—, es también el arquitecto con más obra en Barcelona, con 482 edificios a su nombre, muchos de los cuales de carácter monumentalista, como la Duana del Port, el Palau de Justícia, el templo del Sagrat Cor del Tibidabo, la Casa Arnús y la sede de la Caixa de Pensions en la Via Laietana. El arquitecto escogió para este edificio situado en el paseo de Gràcia, con fachadas también en la ronda de Sant Pere y la calle Casp, un estilo sobrio, marcado por la limpieza de las fachadas y la ornamentación de estilo medievalizante.

Construido en el periodo 1890-91, fue objeto de una primera rehabilitación entre 1982 y 1984, a cargo de los estudios Martorell-Bohigas-Mackay y Espinet + Ubach, y este segundo estudio ha sido el encargado de hacer ahora una segunda rehabilitación mucho más profunda, entre los cuales se incluyó la construcción de un aparcamiento subterráneo de cinco plantas con rampa helicoidal que, eso sí, se cobró como víctima la célebre cafetería Bracafé de la calle Casp, situada donde está ahora el acceso al parking. La rehabilitación, además, ha permitido ganar más de 600 metros cuadrados gracias a la sustitución de las gruesas paredes de carga interiores por pilares.

"Se debería poder visitar"

El edificio, que ya vuelve a estar plenamente operativo, está dedicado al alquiler de oficinas y mantiene en los bajos algunos locales comerciales. Ahora bien, aunque desde la calle se puede disfrutar de la fachada en toda su amplitud, de momento no está previsto que se ofrezcan visitas al interior, aunque, preguntado por elNacional.cat por esta posibilidad, Espinet apunta que "se debería poder visitar". Hoy por hoy, su utilización como edificio de oficinas no parece favorecer las visitas, aunque no sería descartable abrir la Casa Pascual i Pons en el contexto de festivales de arquitectura como el 48 Open House o incluirla en una "ruta Sagnier" ya existente.

Casa Pascual y Pons / Foto: Carlos Baglietto
Entre los aspectos más modernos de la casa destaca esta hipnotizante escalera interior, de obra nueva. Igualmente, se conserva la escalera noble que lleva al piso principal, donde vivían los propietarios / Foto: Carlos Baglietto
Casa Pascual y Pons / Foto: Carlos Baglietto
Una de las innovaciones de la rehabilitación de la Casa Pascual i Pons ha sido la construcción de un aparcamiento con cinco plantas de sótano conectadas por una rampa helicoidal / Foto: Carlos Baglietto

En todo caso, Espinet, que defiende que los edificios "no se tienen que derribar, sino rehabilitar", ha podido llevar a cabo, junto con Perramon, un híbrido de rehabilitación en la parte más patrimonial y nueva construcción en el resto, incluyendo el aparcamiento —que no cubre toda la planta del edificio, ya que justo en una parte pasa la L4 del metro. El edificio constaba de 12.772 m² y 6 plantas sobre rasante al empezar el proyecto. Después de la rehabilitación, se han conseguido 12 plantas —5 de ellas en sótano— y una superficie total de 19.405 m². Y por encima de todo, recuperar una obra que no se merece pasar desapercibida a pesar de estar próxima a los gigantes del modernismo del mismo paseo de Gràcia.

Un libro recoge la obra más moderna de Espinet + Ubach

Coincidiendo con la finalización de la rehabilitación de la Casa Pascual i Pons, se ha publicado E + U, últimas obras y proyectos (ACTAR, 2023), el libro que recoge la tarea de este estudio de arquitectura durante los últimos 15 años de actividad en cuatro grandes apartados: edificios públicos, vivienda social, grandes rehabilitaciones y su particular experiencia en Colombia. El libro recoge el periodo 2007-2022, es decir, a partir de la crisis que sufrió la construcción y en el que el estudio ha producido catorce obras, algunas todavía sin acabar. El libro se presentará de manera oficial este jueves, 23 de febrero, en el Col·legi d'Arquitectes de Catalunya (COAC).

Casa Pascual i Pons / Foto: Carlos Baglietto
La casa Pascual i Pons, que tiene fachadas en el paseo de Gràcia, en la ronda de Sant Pere y en la calle Casp, destaca por las dos torres con pináculos de cerámica y es visible desde la plaza de Catalunya / Foto: Carlos Baglietto