Barcelona tiene un déficit de verde urbano importante. La ciudad está muy por debajo de los baremos deseables en cuanto a superficie de verde urbano por habitante que establece la OMS y que tendría que ser de 10-15 m², mientras que en la ciudad barcelonesa es de menos de 7 m². Esta cifra es todavía más negativa en el distrito del Eixample, menos 2 m² urbano por habitante. Y es en el Eixample, precisamente, donde se están ejecutando las obras de la primera fase de la prolongación de la L8 de los Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) desde plaza Espanya hasta Gràcia, que permitirá conectar la línea Llobregat-Anoia con la línea Barcelona-Vallès. Es por eso que la sindicatura de greuges de Barcelona hará el seguimiento y control de estas obras, con el objetivo de fiscalizar que no se pierde ningún espacio verde en la ciudad.
Con el fin de trabajar en la mejora de este grave déficit de espacios verdes en Barcelona, la defensoría de la ciudadanía ha instado al consistorio a hacer todos los esfuerzos posibles para que los parques y jardines de que dispone la ciudad estén en buenas condiciones y se puedan utilizar para favorecer la calidad de vida y el bienestar de sus habitantes. Las obras de la L8 de los FGC empezaron el martes 6 de agosto y su ejecución afecta a la arboleda del parque de Joan Miro, ya que se convertirá en el espacio logístico de las tareas para alargar la línea de los ferrocarriles entre la plaza de España y Gràcia. Según información del Ayuntamiento, entre la vegetación damnificada, hay 94 elementos: 75 pins y 19 árboles más, casi la mitad de los cuales son palmeras. En un comunicado, la sindicatura informa de que hará un seguimiento de las actuaciones municipales con el fin de garantizar que, una vez se acaben las obras en la zona del parque de Joan Miró, se repongan los espacios verdes y se trasplanten los árboles talados.
El parc Joan Miró s’ha quedat sense 94 arbres per les obres d’ampliació dels Ferrocarrils entre la plaça Espanya i Gràcia. pic.twitter.com/uHp0xysr6d
— ᴊᴏʀᴅɪ ᴄᴏʀʙᴀʟᴀɴ (@jcorbalan) August 28, 2024
Comisión de seguimiento de las obras
El organismo que tiene como síndico a David Bondia ha recomendado al Ayuntamiento promover la creación de una comisión de seguimiento de las obras de la L8 de los FGC, conjuntamente con la Generalitat de Catalunya, en el que participen todas las personas interesadas y que asegure la transmisión de información sobre la evolución de las obras y las posibles incidencias. "A pesar de no ser el responsable directo de las obras de ampliación de la línea L8 de FGC, el Ayuntamiento tiene que velar para que las incidencias en la ciudadanía sean las mínimas posibles y se resuelvan cuanto antes mejor. En concreto, las obras ocasionarán afectaciones en el carril bici del lado norte de la Gran Vía, la parada doble de bus, la parada del aerobús, y otras calles como la carretera de la Bordeta y la avenida del Paral·lel," afirma el comunicado.
Ajustarse a los plazos
La sindicatura también ha informado de que requirió al Ayuntamiento, a petición de los ciudadanos, cuanto sería la duración prevista de la ocupación del espacio donde se instala la zona logística, pero "el consistorio no facilitó una respuesta concreta". Aunque informó al vecindario de que la afectación sería de dos años y medio, la sindicatura, "visto lo que ha pasado en otras obras de gran envergadura", remarca "la conveniencia de ajustarse al máximo a los plazos de ejecución y, si puede ser, intentar reducirlos por todos los agravios que supondrán para el vecindario más próximo.
¿Qué es la Sindicatura de Greuges de Barcelona?
Es una institución que vela por la defensa de los derechos fundamentales y las libertades públicas de los ciudadanos y ciudadanas de Barcelona y de las personas que se encuentran en la ciudad. Es un órgano unipersonal complementario de la administración municipal, encabezado por el síndico y su junta, y que dispone de un equipo multidisciplinar de asesores y técnicos. El síndico de greuges de Barcelona es, desde octubre del 2021, David Bondia. Este supervisa la actuación de la administración municipal y de los servicios públicos que dependen, especialmente todo aquello que hace referencia a los derechos y libertades establecidos en la Carta Europea de Salvaguardia de los Derechos Humanos en la Ciudad. La Sindicatura de Greuges de Barcelona es un organismo que actúa de manera independiente del Ayuntamiento de Barcelona, y con un ámbito de actuación local.