El Ayuntamiento de Barcelona triplicará el número de profesionales del equipo de la Unidad Antidesahucios, que pasará de 16 a 43 miembros, para conseguir más capacidad de gestión que permita la mediación e intervención preventiva en situaciones de pérdida de vivienda, según han anunciado este lunes la teniente de alcalde de Derechos Sociales, Laura Pérez, y la concejala de Vivienda, Lucia Martín, que, además, han anunciado una inversión de cinco millones de euros en los próximos dos años. El equipo se concretará con un aumento de 13 a 30 profesionales en el ámbito social y la mediación, 20 de los cuales estarán a pie de calle y 10 en las oficinas centrales y, además, el servicio tendrá un nuevo equipo jurídico de cinco personas, y completarán el equipo personal de administración y su coordinación.
La ampliación del servicio permitirá que la Unidad Antidesahucios se ocupe de todas las acciones que actualmente están repartidas en diferentes servicios y que los Servicios Sociales puedan seguir trabajando los casos en el resto de dimensiones que le son propias. La Unidad Antidesahucios del Ayuntamiento de Barcelona, creada en 2015 y que ha acompañado a más de 13.000 familias desde su creación, hará un paso adelante este 2022 como servicio específico municipal que centralizará de manera integral la gestión de la atención social a las familias en procesos de pérdida de la vivienda. El objetivo principal, a través de la prevención y la mediación previa que ahora se reforzará, es evitar al máximo que se produzcan desahucios y que estos lleguen a puerta el día señalado.
31.000 personas atendidas
A estas alturas, gracias a la intervención de la Unidad Antidesahucios y los movimientos vecinales, el 90% de las órdenes de lanzamiento en la ciudad no se ejecutan, y el 80% se suspenden antes del día señalado. El acompañamiento a las familias es clave para ayudar a superar la brutalidad, la ansiedad y la angustia que suponen los procesos de lanzamiento. Desde 2017 (exceptuando 2020 por el paro general durante el confinamiento), el número de familias atendidas por la Unidad ha sido estable, situándose en el 2021 en 2.267 familias, es decir, un total de 31.000 personas de las cuales un tercio eran menores.
La estrategia del servicio seguirá siendo la mediación, con el acento puesto en la prevención y llegando a intervenir lo antes posible, para activar recursos como las ayudas al pago del alquiler o de compensación de la deuda generada, la entrada a programas sociales como la Bolsa de Alquiler municipal, y especialmente con respecto a los grandes tenedores, realizar los requerimientos oportunos con el fin de cumplir las obligaciones legales vigentes. La activación preventiva de la mediación tiene un doble beneficio, evitar que las situaciones se agraven y se dificulte así la llegada a un acuerdo, y que la consecución de una solución evite el alargamiento del proceso y, por lo tanto, el sufrimiento de las familias.