Trece mercados tradicionales de diferentes países del mundo, entre los cuales el de la Boqueria, en Barcelona, han suscrito una petición para solicitar a la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) que reconozca estos lugares históricos como Patrimonio de la Humanidad. Según un comunicado del mercado barcelonés, así ha quedado recogido en el documento acordado por los máximos representantes de los trece mercados reunidos la semana pasada en Florencia (Italia) con motivo del 150 aniversario del emblemático Mercato di San Lorenzo. El presidente de la Boqueria, Jordi Mas, destacó durante la asistencia al congreso, celebrado en la sala Luca Giordano del Palau Medici Riccardi de Florencia, la importancia de conseguir el reconocimiento oficial por parte del organismo de las Naciones Unidas, ya que eso garantizará la preservación y la protección de los mercados como estamentos históricos.
"Junto con el resto de representantes hemos acordado la necesidad de impulsar acciones para proteger la identidad de nuestros mercados y reflexionar sobre el mercado del futuro", afirmó Mas, que también ha apuntado que "hoy día vemos nuevos hábitos de consumo que implican el consumo en el mismo establecimiento, y por eso tenemos que potenciar la gastronomía en las paradas, con el fin de diversificar la oferta siempre basada en productos frescos y de calidad, para poder satisfacer tanto a los turistas como a los clientes locales de toda la vida". Por su parte, el presidente del consorcio Storico Mercato Centrale de Florencia, Massimo Manetti, puso de relieve que "a pesar de las diferencias geográficas y culturales, el desafío que tenemos es el mismo: defender la historia y la tradición que se transmiten de generación en generación". Manetti precisó que en un mes se iniciaría la recogida de firmas para el memorándum con que se solicitará en la UNESCO el reconocimiento oficial.
Además de la Boqueria y el de San Lorenzo, asistieron al congreso y suscribieron la petición el mercado de Esperanza, de Santander (España); el mercado Torvehallerne KBH, de Copenhague (Dinamarca); el Nishiki Market, de Kioto (Japón); el Oslo Mathallen (Noruega); el Malmø Saluhall (Suecia); el mercado de Cork (Irlanda); el Markthalle Neun, de Berlin (Alemania); el Nami Market, de Riga (Letonia); el Mahane Yehuda Market, de Jerusalén (Israel); el Mercato delle vettovaglie, de Livorno (Italia); y el MEQ, de Follonica (Italia).
Un mercado marcado por la turistificación
El mercado de la Boqueria, situado en la Rambla de Barcelona, mantiene su vocación tradicional, pero está muy marcado por la turistificación, un hecho que ha implicado que buena parte de las paradas se hayan reconvertido en espacios de comida rápida enfocados a este público.