El Hivernacle del parque de la Ciutadella ha sido reinaugurado este lunes después de 14 años cerrado, una vez se ha culminado una remodelación que empezó en agosto del 2022. La reforma ha comportado una inversión de cerca de dos millones de euros y ha permitido restaurar las tres naves que conforman el Invernadero, la nieve central y las dos laterales, nombradas nave Picasso y nave Magnòlies. El alcalde Jaume Collboni ha destacado que el Invernadero es la primera pieza de la Ciutadella del Conocimiento, que quiere convertir el parque de la Ciutadella en un espacio de investigación e innovación de referencia, y que incluirá cinco proyectos estratégicos, la mayoría de los cuales ya están en marcha. "Será el polo de conocimiento e innovación más importante del sur de Europa", ha asegurado el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni.
16 meses de obras
Los trabajos de restauración, que tenían que empezar el julio pasado, finalmente arrancaron el 31 de agosto. Tenían que tener una duración de 12 meses que han acabado siendo 16. Finalmente, este lunes se ha presentado el nuevo Hivernacle una vez finalizadas las obras que han permitido rehabilitado el edificio, tanto en el interior como en el exterior, y resolver las tipologías estructurales que se detectaron el año 2015, cuando se intentó hacer una reforma que se tuvo que detener poco después porque la empresa constructora fue a la quiebra. La anterior reforma parcial fecha del 2009, cuando se priorizaron las actuaciones más urgentes. Desde entonces el invernadero está cerrado al público. La reforma actual del Invernadero también ha incluido la instalación de plantas subtropicales que se regarán con agua freática, un sistema de ventilación monitoreado y humidificadores.
Legado de la Exposición de 1888
El Invernadero de la Ciutadella es un edificio modernista de cerca de un millar de metros cuadrados, muy emblemático, caracterizado por los techos y los grandes vitrales de cristal, que está catalogado como Bien Cultural de Interés Nacional. El edificio se construyó siguiendo el proyecto del arquitecto a Josep Amargós i Samaranch (1883-1887) con motivo de la Exposición de 1888. El espacio formaba parte de un proyecto museístico y científico proyectado por otro arquitecto, Josep Fontserè i Mestres, que también incluía el Umbráculo y el Museo Martorell.
Cinco proyectos por un complejo de 290 millones
La Ciutadella del Conocimiento incluye los tres edificios de investigación del antiguo Mercat del Peix (con las obras ya en arranques); el Centre de Biocièncias del CSIC (finalización prevista en el 2027); la rehabilitación del Castell dels Tres Dragons y del Umbracle (las dos para finales del 2026); el Centre Martorell d'Exposicions (que se inaugurará de forma inmediata); la nueva Biblioteca Central (prevista para el 2029), y el nuevo Zoo (que ya está aplicando el nuevo plan estratégico). El complejo tendrá unos 45.000 m² e incluye un parking soterrado. La inversión global asociada es de 290 millones de euros, 75 de los cuales aportados por el Ayuntamiento de Barcelona, que quiere que todos los proyectos, a excepción de la biblioteca, estén terminados durante este mandato.