El Ayuntamiento de Barcelona ha iniciado este lunes las obras para eliminar el actual urbanismo táctico de la calle Pelai, que será sustituido por zonas de aparcamiento para motos y bicicletas, así como nuevos espacios para carga y descarga. La primera teniente de alcaldía, Laia Bonet, ha justificado el cambio en esta calle de Barcelona por "el uso, prácticamente nulo, por parte de los peatones" del urbanismo táctil. Sin embargo, la plataforma vecinal Eixample Respira ha denunciado que la medida aumentará la contaminación de la ciudad y ha reivindicado una pacificación completa.

La creación de este nuevo espacio responde a las demandas de más plazas de estacionamiento para bicicletas y motocicletas en el centro de la ciudad. En concreto, se estrenarán 64 plazas de aparcamiento de motocicletas, 72 plazas para las bicicletas y 20 plazas más de Distribución Urbana de Mercancías (DUM) para la carga y la descarga. Estas plazas se concentrarán en el tramo situado entre la plaza Universitat y la calle Balmes, lugar donde también se mantendrán los espacios actuales para contenedores. Entre Balmes y la plaza Catalunya, se configurará un doble cordón de servicios, manteniendo las plazas de carga y descarga y creando plazas de aparcamiento para bicis y motos.

La nueva configuración de la calle Pelai / Foto: Europa Press

 

Eixample Respira reprochó al consistorio que da un paso atrás en la mejora de la calidad del aire de la ciudad, y criticó que "el carril compartido entre bici y moto para poder estacionar es confuso y peligroso". Como alternativas, ha propuesto pacificar toda la calle Pelai con un modelo como el de Portal de l'Àngel, o construir un carril bici que permita llegar a la plaza Catalunya.

¿Cuánto tiempo durarán las obras en la calle Pelai?

Los trabajos para eliminar el urbanismo táctico tendrán una duración de una semana y permitirán crear un nuevo carril de servicios, que se añadirá al ya existente en el Pelai, según ha explicado el ayuntamiento este lunes en un comunicado. Las obras no prevén afectaciones en los carriles de circulación, ni modificar el espacio de peatones en la acera. Toda esta transformación se enmarca dentro del Pla Endreçat que Laia Bonet y el concejal de seguridad, Albert Batlle, presentaron el 26 de julio para modificar el urbanismo táctico de la ciudad.

El poco éxito del urbanismo táctico

En el anterior mandato, el Ayuntamiento decidió ampliar de cinco a nueve metros el espacio para peatones de la calle Pelai de Barcelona, eliminando dos carriles de circulación. Las obras se tenían que culminar este julio, con la finalización de la ampliación de la acera montaña de la calle Pelai de Barcelona en su cruce con Balmes. El objetivo de esta actuación era mejorar el espacio y los recorridos de los peatones en este ámbito y configurar una calle con más espacio para peatones y menos para los coches. Sin embargo, aunque el urbanismo táctico fue galardonado con el Premio Grand Laus 2023 en diseño gráfico, los peatones lo han utilizado "poco", según ha explicado la primera teniente de alcaldía.