Solo 48 horas antes de que Barcelona tenga un nuevo alcalde, Jaume Collboni ha presentado oficialmente su candidatura para este cargo y ha reclamado generosidad a los comuns de Ada Colau, que habían descartado regalar sus votos a los socialistas si no hay un pacto de izquierdas. Después de constatar que ERC está más por investir a Xavier Trias como jefe de la lista más votada el 28-M, y optar por un frente independentista y no de izquierdas, Collboni ha clamado para que los comuns den apoyo a su candidatura y ha prometido que si él acaba siendo alcalde, los de Ada Colau formarán parte de su gobierno municipal. Estos dos partidos suman 19 concejales, a 2 de la mayoría absoluta y, por lo tanto, otro partido tendría que votarles. Por ello, este mensaje no solo va dirigido a Colau, sino también al PP. Hay que tener en cuenta que Daniel Sirera había condicionado su apoyo a Collboni a que Colau y su equipo no formaran parte del gobierno municipal. Con las palabras de Collboni, que se ha comprometido a un gobierno de coalición, esta posibilidad se complica todavía más.

En un acto en la sede nacional del PSC y ante los concejales de su partido, Collboni ha asegurado que el sábado habrá dos opciones sobre la mesa: que el nuevo alcalde sea Xavier Trias o que sea él. Por eso, en un mensaje dirigido tanto a los comuns como a los populares, un mes antes de las elecciones generales y después de que los ministros del PSOE hayan insistido en que Xavier Trias es el candidato de Carles Puigdemont. "Quien no vote al candidato del PSC está permitiendo que el candidato de Junts sea el alcalde de Barcelona", ha advertido, en referencia a Trias.

 

Collboni descarta "ocurrencias" y clama por un alcalde fuerte

Collboni también se ha referido a la propuesta de Colau de repartirse la alcaldía entre ellos dos y Ernest Maragall como una medida casi a la desesperada para conseguir un pacto de izquierdas por el que apuestan los comuns. En este sentido, el socialista ha asegurado que lo que necesita la ciudad es un alcalde estable y un gobierno que gobierne. "Nos corresponde estar a la altura del mandato democrático y hacerlo con rigor y sin ocurrencias, porque el desencanto con la política llega cuando la ciudadanía nos ve incapaces de llegar a acuerdos", ha reflexionado. Por eso, también se ha reivindicado como el líder de la fuerza de izquierdas más votada y ha subrayado que solo un concejal separa a Trias por Barcelona y el PSC.

Collboni lamenta que la dirección nacional de ERC haya impedido un gobierno progresista

El candidato socialista se ha referido también a Ernest Margall, pero más concretamente a los líderes de su partido, que lo descartaron "demasiado rápido". "Barcelona merece un gobierno de izquierdas y eso era posible, pero dejémoslo claro, si ERC lo apoyaba de entrada", ha reflexionado, recriminando que los republicanos han optado por un frente independentista en la ciudad: "Si el sábado esto se confirma, tendremos un gobierno en minoría e incapaz de gobernar que nos lleva al pasado".

Aunque inicialmente Collboni ha asegurado que su candidatura es coherente con lo que dijo en campaña, rápidamente cambió el discurso y puntualizó que lo es con lo expresado en la noche del 28-M, tras recibir más de 130.000 votos y ser segunda fuerza: que no renunciaría a la alcaldía. Durante las dos semanas previas se había limitado a asegurar que iba a ganar las elecciones y que si no lo hacía, iría a la oposición, algo que no se ha acabado traduciendo a la realidad, como ha confirmado hoy con su candidatura.