Jaume Collboni quiere otorgar la Medalla de Oro de la Ciudad de Barcelona a la Editorial Planeta, según un comunicado del gobierno municipal de este viernes. La propuesta del alcalde coincide con el 75.º aniversario de la fundación de la editorial, "en reconocimiento de su compromiso con la ciudad". Además, el ejecutivo ha señalado que tanto la Editorial Planeta como el Grupo Planeta "han contribuido al liderazgo de Barcelona en el mundo editorial y a su proyección internacional". También añade que la capital catalana será la ciudad invitada de honor a la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FILO) en 2025, el encuentro cultural más importante de Iberoamérica.
"El gobierno municipal valora igualmente que el Grupo Planeta se ha caracterizado siempre por su carácter innovador, tanto en los contenidos como en productos y formados, y también en su promoción y comercialización" y "el compromiso de la editorial con el talento y la innovación" que se materializa también con la convocatoria anual del Premio Planeta de Novela, creado en 1952 y que se ha convertido en un acontecimiento literario de gran repercusión, añade el comunicado del ejecutivo local.
Planeta trasladó la sede a Madrid por el procés
La Editorial Planeta se fundó en 1949 en Barcelona por José Manuel Lara y, posteriormente, impulsó la creación del Grupo Planeta —que con más de 70 sellos editoriales, es líder del mercado editorial en España y América Latina y líder de referencia en el ámbito de los medios de comunicación, la formación y el entretenimiento audiovisual con presencia de más de 20 países—. A raíz del procés, en 2017 trasladó su sede a Madrid, aunque mantiene en la capital catalana la de Ediciones 62 y del conglomerado Grup62. Su presidente es José Creuheras, que también es miembro del Patronato de la Fundación Barcelona Cultura, promotora de la colaboración público-privada en el ámbito de la cultura y las industrias creativas.
El anuncio de Collboni tiene lugar después de la polémica para denegar un permiso para promocionar revistas en catalán porque "no es de interés general". Concretamente, la Associació de Publicacions Periòdiques en Català (APPEC) reprochó al gobierno municipal que no los deje instalar la 'Revisteria', una caravana que ha recorrido todo Catalunya. Ante la controversia, el ayuntamiento revisó de oficio la petición de instalarse ante el Mercat del Born y decidió finalmente autorizar la campaña de promoción de revistas en catalán que inicialmente había denegado.