Vuelve la tensión en la parte alta de Barcelona por la convocatoria antiokupa de partidos como Ciudadanos y Vox, que protestan por la ocupación de los edificios La Ruïna i El Kubo, en la plaza de la Bonanova. La presencia de miembros de estos partidos ha vuelto a hacer estallar el conflicto esta tarde en la plaza de la Bonanova. La semana pasada una convocatoria parecida forzó la actuación de los Mossos d'Esquadra que separaban a los okupas de los antiokupas. Si en aquella ocasión había 30 okupas, este martes el volumen ha crecido y, según ha podido saber ElNacional.cat, de fuentes de los Mossos, se han concentrado unos 250 okupas fuera de los edificios y 50 dentro.
La policía catalana ha hecho este martes un despliegue para evitar enfrentamientos, que consiste en la movilización de 10 furgonetas de Recursos Operativos (ARRO) y 10 de la Brigada Móvil (BRIMO). Alrededor de las 20.00 horas, los Mossos tenían a los okupas encapsulados, de forma que la tensión estaba controlada. La duda era saber si los okupas acabarían avanzando hacia la línea policial o no, pero finalmente, casi dos horas después, se han ido sin producir ningún incidente, más allá de algún lanzamiento puntual contra los agentes. Los anti-okupas han respondido con gritos de rechazo, pero la tensión no ha ido a más.
Anteriores enfrentamientos
La semana pasada ya se vivió tensión en este punto de Barcelona, también por una concentración de diferentes partidos de la derecha española. En aquella ocasión, unas treinta personas encapuchadas con pintura y harina salieron del interior de los espacios Kubo y Ruïna y se tropezaron consigo con agentes de paisano de los Mossos d'Esquadra y la Brimo que les interceptaron. Fue entonces cuando los okupas lanzaron la pintura y harina contra la policía, que respondieron utilizando las porras.
De hecho, la candidata de Ciudadanos a la alcaldía de Barcelona, Anna Grau, se comprometió la semana pasada a estar presente cada martes a las 20.00 horas en la Bonanova para protestar en contra de la presencia de los okupas e hizo un llamamiento al resto de partidos a movilizarse de manera "pacífica". "Cuanto más seamos, más fácil será desalojar el problema", afirmó. Asimismo, Grau cargó contra el Ayuntamiento, a quien acusó de permitir la okupación por miedo a que "desalojar antes de las elecciones les haga perder votos".
El conseller Elena sobre la okupación
Precisamente, el conseller del Interior, Joan Ignasi Elena, abordó la cuestión de la ocupación en un pleno del Parlament y reconoció que, en el caso de la delincuencial, "quizás hacen falta cambios legislativos" para pararlas. Sin embargo, subrayó que hay "muchos problemas de carácter operativo para perseguir" esta práctica y que sería necesario modificar la norma para castigar el lucro a consecuencia de la ocupación.