El año 1895, un adolescente Pablo Ruiz Picasso llegó a Barcelona con su familia, instalándose bien cerca del Port Vell. Integrado en la vida de la ciudad y de sus movimientos culturales, Picasso aprendió el catalán y mantuvo una intensa relación con el entorno portuario que formaba parte de su día a día. Ahora, en el marco de la Regata Cultural organizada en el contexto de la Copa América de Vela, el Port Vell refleja este "flechazo" -en definición del concejal de Ciutat Vella, Albert Batlle- entre el pintor y el Port, por medio de la exposición 'Picasso i el port', inaugurada este lunes y que se podrá visitar hasta el 28 de febrero del 2025 en varios ámbitos al aire libre del Port Vell.
El pistoletazo de salida ha contado con la presencia de Paloma Picasso, hija del pintor, que ha cortado la cinta inaugural, mientras que Emmanuel Guigon, director del Museo Picasso ha recordado la importancia de la exposición desde la vertiente "didáctica", a la vez que ofrece un recorrido por todo el ámbito portuario que recoge los pasos de Picasso ahora hace más de cien años. Por su parte, Davi Pino, director del Port Vell, ha apuntado que la exposición forma parte de "la apuesta cultural" incluida en la celebración de la Copa América de Vela, recordando que la celebración de esta competición náutica ha permitido "llevar a cabo proyectos comunes" entre entidades y administraciones, como es el caso de 'Picasso i el port'.
Seis paneles por todo el ámbito portuario
La exposición responde a una iniciativa conjunta del Ayuntamiento de Barcelona a través de la Regata Cultural, el Port Vell, BWA Yatching y especialmente, el Museo Picasso de Barcelona, bajo el comisariado de Eugènia Peña, y se compone de seis paneles instalados en seis puntos del Port Vell -dos en el Moll de la Fusta, uno en el Moll del Depòsit (plaza de Pau Vila), dos más en el Moll de la Barceloneta y uno en la plaza del Mar, donde se detalla la relación del pintor con el entorno marítimo a través de informaciones de contexto, fotos que representan los espacios al principio del siglo XX y comparativas entre los dibujos y cuadros de Picasso con sus motivos reales.
Con respecto a las seis instalaciones, el itinerario ideal empieza en el Moll del Dipòsit con 'El port de Picasso', para continuar por el Moll de la Fusta con 'De la vela al vapor' y 'Un nou port'. Acto seguido se propone retroceder en dirección a la Barceloneta para visitar, también en la zona del muelle del paseo de Borbó, 'Treballs portuaris' y 'Gastronomia i oci'. Finalmente, en la plaza del Mar se puede ver el plafón 'La vida social vora el mar'.