Ya son cuatro las playas de Barcelona con una ocupación de más del 80% este sábado por la tarde. Hacia las 17 horas se había cerrado el acceso a las de Nova Icària y Bogatell, pero también se ha tenido que hacer a las de Levante y Mar Bella.
La cantidad de gente que se colecta hace imposible mantener las distancias de seguridad. La Guardia Urbana y los informadores desplegados en la arena están haciendo que los bañistas se redistribuyan para que se puedan mantener las distancias.
Este fin de semana es el primero que los barceloneses pueden disfrutar de las playas de la ciudad para tomar el sol y bañarse coincidiendo con el primer fin de semana de fase 2.
Este mediodía se han podido ver imágenes poco usuales el mes de junio en playas habitualmente concurridas, como la Barceloneta o Sant Miquel, ahora libres de turistas. Ninguna de las playas de la ciudad ha llegado a niveles límite durante la mañana, pero sí por la tarde.
Mensajes por megafonía, carteles y algún informador recuerdan a los usuarios que hay que mantener medidas de seguridad, como mantener una distancia de dos metros entre grupos. Aunque en muchos casos se mantienen las distancias, en muchos otros es más difícil discernir grupos y la tendencia general sigue siendo la de instalar la toalla el más cerca posible de la cerca del mar.
Para evitar aglomeraciones, el Ayuntamiento de Barcelona recomienda consultar la ocupación de las playas en la web municipal antes de hacer el desplazamiento. A primera hora de la tarde, por ejemplo, la web indica que en la mayoría de playas es alta, de entre el 60 y el 80%, situándose por encima del 80% en la Nueva Icària y Bogatell.
Esta semana el Ayuntamiento instaló los 18 videosensors que permiten calcular la ocupación de las playas y también se han desplegado algunos informadores, encargados de acompañar la ciudadanía para que la distribución en la arena permita mantener las distancias entre personas o grupos.