Con las negociaciones de los presupuestos de Barcelona para el 2025 abiertas, los partidos ponen sobre la mesa cuáles serán sus peticiones para llegar a un acuerdo. Si por parte del gobierno municipal ya se ha anunciado que, en el apartado de ordenanzas fiscales, quieren poner el foco en la congelación de impuestos y el aumento de la fiscalidad turística, Barcelona en Comú ya ha presentado varias propuestas. Hace unos días los comunes ya presentaron un primer paquete de medidas -incluyendo cerrar dos terminales de cruceros y congelar las tarifas de transporte público-, al cual se ha sumado este martes un segundo que incluye, entre otros, el proyecto de pacificar cuatro calles de la ciudad siguiendo el Modelo Supermanzana, que configurarían, por su longitud, auténticos megaejes verdes.
Tal como ha anunciado Janet Sanz, actual portavoz de Barcelona en Comú y futura presidenta del grupo municipal cuando se marche Ada Colau, esta formación quiere incluir en las cuentas del próximo año los procesos de pacificación de cuatro importantes viales de la ciudad, siguiendo el modelo supermanzana en su versión de eje verde, aunque el actual gobierno municipal ha decidido rectificar esta política dando prioridad a otros tipos de pacificaciones que permitan ganar espacios verdes en solares abandonados, no urbanizados o con usos provisionales, como esquinas, interiores de manzana, plazas y esquinas. Al contrario de lo expresado por el PSC, para los comunes los ejes verdes no deben pasar a la historia.
¿Cuáles serían los nuevos ejes verdes?
La nueva propuesta de los comunes incluye la creación de tres nuevos ejes verdes y la prolongación de uno ya existente. En concreto, Barcelona en Comú propone convertir en eje verde las calles de Sants y Creu Coberta entre las ramblas de Badal y Brasil y la plaza Espanya, un tramo que los fines de semana está cerrado al tráfico en el marco del programa Obrim Carrers y con una longitud de 1,51 kilómetros y que se haría a partir del modelo ya vigente en la calle de Pi i Margall. Una segunda pacificación tendría lugar en la calle Sicília, entre Travessera de Gràcia y Ausiàs Marc, donde enlazaría con un pequeño tramo ya para peatones hasta la Estación del Nord. Este eje verde tendría una longitud de 1,73 km.
El tercer proyecto sería de los más largos y el que más merecería la calificación de megaeje verde: el paseo Maragall en toda su extensión, es decir, los 2,76 km de longitud entre la calle Tajo y las calles Còrsega y Fresser, siguiendo también el modelo de Pi i Margall. Finalmente, la cuarta intervención sería en la calle Consell de Cent en el tramo entre el paseo de Sant Joan y la avenida Meridiana, de 1,61 km, que sumado al ya existente entre paseo de Sant Joan y la calle Vilamarí supondría la creación de otro megaeje verde de 4,42 kilómetros de longitud.