Cuando quedan pocos años para llegar al centenario de la Exposición Internacional de 1929 y en pleno proceso de reconversión del espacio ferial, Barcelona ha dicho adiós en un pabellón superviviente y casi centenario, aunque de interés patrimonial secundario y que hacía años que estaba en desuso. Se trata del Pabellón de las Eléctricas, abandonado desde hacía dos décadas y que amenazaba hundimiento. Según ha adelantado 'Betevé', en diciembre empezaron las tareas de derribo y este viernes se han acabado de retirar las últimas estructuras que quedaban derechas, para dar paso a una futura zona verde, cuya urbanización tendrá que esperar a que se supere la actual situación de sequía.
El Pabellón de las Eléctricas, situado en la avenida de los Montanyans, entre el Pueblo Español y el Palau Nacional fue construido como pabellón comercial de la exposición de 1929 y en su interior se hacían proyecciones de cine. Después de la feria funcionó como escuela y posteriormente como sede y museo del Instituto Botánico de Montjuïc, pero desde 2003 no tenía ningún uso, lo cual hizo que la edificación se fuera deteriorando, a pesar de estar catalogado con un nivel D de protección. El pasado octubre y ante el riesgo de hundimiento de la cubierta, el Ayuntamiento de Barcelona tapió puertas y ventanas y precintó el acceso después de una visita técnica conjunta Bomberos de Barcelona y la Guàrdia Urbana.

En aquel momento, el consistorio también anunció la intención de derribar el edificio a causa de su mal estado, aunque la ejecución se ha tenido que esperar a tener un estudio de la Dirección de Patrimonio. Hay que tener en cuenta que el nivel de protección de nivel D permite el derribo si previamente se documenta la necesidad de hacerlo. En todo caso, buena parte del recinto ferial de 1929 ha ido desapareciendo con el tiempo, y excepto los grandes pabellones de la avenida Maria Cristina y el Palau Nacional, ya quedan pocos más vestigios, como el Pueblo Español, que de hecho tenía que ser efímero y derribarse una vez finalizada la exposición, o la Casa de la Premsa, que a medio plazo se tendría que reconvertir en biblioteca.
El Palacio de las Misiones, derribado en 1969
Menos suerte tuvo el Palacio de las Misiones, ubicado en un entorno próximo en el Pabellón de las Eléctricas, en este caso en lo que ahora son los jardines de Joan Maragall, en el recinto del Palacete Albéniz, derribado en 1969 y de memoria infausta, porque durante la dictadura franquista fue reaprovechado primero como prisión para represaliados, después como centro de clasificación de indigentes y finalmente como centro de retención y clasificación de inmigrantes de toda España que no pudieran demostrar tener trabajo o vivienda. Es decir, una especie de CIE 'avant la lettre' especializado en retener españoles de fuera de Catalunya para deportarlos a sus lugares de origen.