No habrá huelga. Los trabajadores de limpieza de Barcelona han acordado desconvocar el paro de basureros que tenía que empezar este domingo 24 de abril por la noche y que se tenía que alargar hasta el viernes 29 de abril. Según ha podido confirmar ElNacional.cat, este viernes se ha reunido la Comisión Paritaria para proceder a la revisión salarial de los años 2019, 2020 y 2021. UGT, sindicato que impulsaba la huelga, explica que "después de varios recesos, discrepancias y valoraciones, se ha llegado a un acuerdo para todo el colectivo". El motivo por el cual planteaban el paro —que llegaba a cerca de 4.000 empleados— era para protestar porque las cuatro empresas contratadas por el ayuntamiento de Barcelona no les habían actualizado las retribuciones salariales en función del IPC desde el año 2018. En paralelo, reclamaban "condiciones dignas" para el personal eventual, eliminar los turnos de siete días seguidos y disponer de un convenio laboral, propio.

El acuerdo al cual se ha llegado, tal como se explica en el comunicado, es que habrá una revisión de los sueldos del 0,6% correspondiente al año 2019; del 0% en referencia al 2020 y del 6% en el caso de 2021. Para más inri, habrá un "adelanto del 2,5% para este año 2022 con un tope de negociación de hasta el 4%". Desde UGT, trasladan que esta resolución es "un buen acuerdo", dado que han conseguido, sostienen, "alcanzar en un 6,6% el poder adquisitivo de los últimos 3 años". En este contexto, "se ha conseguido evitar la huelga" y defienden que "han arrancado positivamente el 2022 con condicionantes", detalles que explicarán más adelante.

La posición del Ayuntamiento

El 11 de abril, el sindicato UGT anunciaba la convocatoria de esta huelga, que tenía que empezar a las 21 horas el domingo 24 de abril y que se tenía que extender hasta el viernes 29 de abril. La razón era la congelación salarial que se iba aplicando desde el 2018. En el escrito de comunicación del paro, el sindicato sostenía que "ante el fracaso de la negociación colectiva", era necesario "acudir a la mediación o finalmente a la huelga", dado que constataban una "incapacidad de llegar a acuerdos en la mesa de negociación por las posiciones inamovibles de las empresas". Las reuniones del comité de empresa no habían resultado fructíferas hasta este viernes. Este jueves, tres días antes de la huelga que se tenía que producir, CGT y CCOO también anunciaban que darían apoyo a la huelga y que se sumaban.

En las últimas horas, ha habido un goteo de reacciones. Los concejales Janet Sanz, Albert Batlle y Eloi Badia comparecían el jueves por la tarde para trasladar la posición del consistorio y cuál sería la actuación durante la convocatoria de huelga. Los tres eran optimistas ante la posibilidad de que se materializara un acuerdo antes de que el paro empezara el domingo, cosa que finalmente ha acabado pasando. En todo caso, se generaba más controversia porque, desde el Ayuntamiento, se emplazaba a los ciudadanos a "la reducción de los residuos" durante los días de huelga y "en la medida de lo posible, sacar lo mínimo". Por su parte, Sanz valoraba que esta convocatoria era injusta: "La ciudadanía y la ciudad no se merecen esta huelga" y defendía el nuevo contrato de recogida de basura: "Nos pone al frente de todas las ciudades a escala del Estado". La Generalitat había anunciado este mismo viernes unos servicios mínimos del 50% en la recogida selectiva de vidrio, envases y papel y cartón durante la huelga de limpieza, servicios que, finalmente, se efectuarán con normalidad por el acuerdo alcanzado entre sindicatos y empresas.