La principal asociación del sector del taxi, Èlite Taxi, no ha podido llegar al millar de vehículos que el lunes mismo prometía su líder, Tito Álvarez, en una movilización de protesta por la multa de 123.000 euros que les ha impuesto la Agencia Catalana de la Competencia (ACCO) por haber hecho "boicot" a Uber. Al inicio de la marcha lenta se han podido contar unos 200 vehículos, que han aumentado hasta los tres centenares cuando la columna ha llegado a la Via Laietana, formando una larga cola entre la plaza Urquinaona y la Gran Vía pasando por las calles de Fontanella, Pelai y Balmes. Sin embargo, Álvarez ha anunciado que aparte de los resultados de la movilización de este martes habrá otra el próximo lunes, con ocasión de la Diada Nacional, porque "el Onze de Setembre es un día para reivindicar derechos y libertades y nosotros los reivindicaremos para el sector del taxi". De hecho, Álvarez ha asegurado que la "gran movilización" del Onze de Setembre incluirá un paro total y la ocupación de la Gran Via.
🔴 Movilización de taxis en Barcelona, DIRECTO | Última hora de la protesta de Élite Taxi
Más allá de lo que pueda pasar la semana próxima, este martes los taxistas han iniciado una marcha lenta hacia las 10 de la mañana con destino a la Via Laietana, sede de la ACCO, donde han protestado por la multa y han pedido la dimisión de Roger Loppacher, presidente de la ACCO, y Susanna Grau, directora general de la ACCO, como máximos responsables de una entidad independiente que, para Élite Taxi, funciona como un "Tribunal de Orden Público o como un tribunal nazi de los que montaban farsas contra los disidentes". Con un discurso contundente en comparecencia previa a los medios, Álvarez ha asegurado que detrás de la multa de ACCO está Uber: "Los mafiosos están allí y los trabajadores, aquí", ha sentenciado.
Una multa que no pueden pagar
En todo caso, Élite Taxi afronta una multa que, según ha admitido el propio Tito Álvarez, "no podemos pagar", y por eso ha advertido que la sanción puede llevar a la desaparición de Élite Taxi, pero no de la lucha que representan. "Moriremos matando", ha afirmado, a pesar de lamentar que ningún grupo de los que forman el Parlament de Catalunya les haya cedido espacio para hablar en la sala de prensa. De hecho, Élite Taxi solo ha contado con el apoyo de Comisiones Obreras y de su secretario general en Catalunya, Javier Pacheco, que ha afirmado que el sindicato está al lado de Élite ante "este atropello, porque ellos defienden los intereses de los taxistas contra las empresas que 'uberizan' el transporte de pasajeros"
Querella contra Loppacher y Grau
En todo caso, el punto álgido de la protesta ha sido hacia las once y media cuando, delante la sede de la ACCO, en la parte superior de la Via Laietana, Tito Álvarez y otros activistas del sector han hecho estallar una traca de mil metros de longitud además de repartir billetes de dólar con la cara del presidente de la ACCO, Roger Loppacher. Además, el portavoz de Élite Taxi ha anunciado que los servicios jurídicos de esta asociación ya preparan una "querella por cohecho, prevaricación y tráfico de influencias" contra Loppacher y Grau, por, a su entender, actuar en función de los intereses de Uber. "Iremos a por ellos", ha señalado Álvarez.
Hay que tener en cuenta, en todo caso, que en esta ocasión Élite Taxi cuenta solo con el apoyo de la asociación Anget, hecho que ha llevado a Álvarez a afirmar que otras entidades del sector, "quieren que desaparezcamos". De hecho, la movilización de este martes ha sido en cierta manera una prueba de fuego de la capacidad de liderazgo de Élite Taxi ante una cuestión que, a pesar de tener que ver con el sector y su lucha contra las plataformas, está motivada por una multa que solo afecta a esta asociación.
La movilización ha continuado hasta el Parlament de Catalunya, pero no se han podido hacer declaraciones en la sala de prensa de esta institución, ya que ningún grupo les ha querido invitar, otro aspecto a tener en cuenta con respecto al éxito de la movilización de este martes cuando, en otras ocasiones, eran diversos los partidos que se ofrecían a abrir las puertas del Parlament a los representantes del sector del taxi.