La reprobación de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, extensiva a su equipo de gobierno incluidos los miembros del PSC, impulsada por Junts per Catalunya en el pleno municipal del Ayuntamiento de Barcelona, no ha salido adelante porque no ha contado con el apoyo de ERC, que ha preferido abstenerse, favoreciendo así que comunes y socialistas tumbaran la propuesta de Junts. En un pleno municipal de marcado carácter electoral que, de hecho, es el último con contenido político, porque el de abril será puramente administrativo, la reprobación de la alcaldesa ha sido planteada por Junts como balance final de un mandato caracterizado por la "falta de liderazgo en defensa de la ciudad de Barcelona y sus intereses y su fracaso para solucionar los principales problemas de los barceloneses y barcelonesas estos dos últimos mandatos".
En la defensa de la propuesta, la presidenta del grupo municipal de Junts, Neus Munté, ha señalado que la herencia del mandato es "bien pobre", con un gobierno municipal "que no reconoce ningún error, victimista y que centrifuga responsabilidad". Munté ha añadido que aparte del resultado de la reprobación presentada al pleno, "la auténtica reprobación pasará el 28 de mayo, que será el comienzo de un cambio en la forma de gestionar el Ayuntamiento." La propuesta ha contado con el apoyo de los grupos del Partido Popular, Ciudadanos, Valents y la concejala no adscrita pero quien ha declinado la balanza ha sido ERC con la abstención.
El concejal de ERC Jordi Castellana ha apuntado que la proposición venía marcada por una cuestión de fondo, "la campaña electoral", y ha señalado que "el legado del señor Trias es la señora Colau". Por eso, ha defendido que "la reprobación vendrá el 28 de mayo", para añadir su convencimiento que en las elecciones próximas elecciones municipales se repetirá una victoria de ERC "como el 2019". "No entraremos a hacer campaña ni tacticismo electoral de corto vuelo", ha señalado Castellana para anunciar una abstención que ha posibilitado que la votación se haya decantado a favor de los partidos que ostentan el gobierno municipal.
Jordi Martí Grau menciona a Laura Borràs
Por su parte, los dos socios de gobierno han votado, como era del todo previsible, en contra de la propuesta de reprobación. La teniente de alcaldía Laia Bonet ha insistido también en el marco electoral actual y ha apuntado que "en todo caso ya será la ciudadanía la que nos repruebe o no", pero ha criticado que Junts considere que "el gobierno municipal ha fracasado en estos años al resolver los problemas de la ciudadanía". "Si lo creen, que le pregunten al señor Trias, el único alcalde que perdió en su primer intento de reelección". Por parte de los comunes, el teniente de alcaldía Jordi Martí Grau ha encontrado que la reprobación al final del recorrido era "absurda", y ha defendido que el gobierno municipal ha disfrutado de una "estabilidad institucional" comparada con la "inestabilidad en el Govern". Además, Martí Grau ha aprovechado la sentencia a Laura Borràs para instar al candidato de Junts, Xavier Trias, a posicionarse sobre si Borràs tiene que dejar su cargo suspendido de presidenta del Parlament de Catalunya.