El Govern ha acordado ampliar un 157% la ZEPA (Zona de Especial Protección de las Aves) del delta del Llobregat, hecho que supone pasar de las cerca de mil hectáreas protegidas que había hasta ahora a preservar un total de 2.407. Con el nuevo dibujo, el ejecutivo sostiene que "se aumenta la exigencia y la necesidad de cumplir condiciones" ante una nueva ampliación del aeropuerto, si bien admite que el Estado podría evitarlas por motivos de interés general y entonces tendría que aplicar compensaciones protegiendo nuevos terrenos.

Precisamente, ampliar el espacio preservado era una exigencia de la Comisión Europea de 2021 a raíz de una denuncia presentada por la organización ecologista Depana del 2003. Fruto de aquel requerimiento, el Govern se comprometió a redefinir la ZEPA y la LIC (Lugar de Importancia Comunitaria) a todo el entorno metropolitano del río Llobregat y la desembocadura, mientras que el Estado delimitó la ZEPA marítima y empezó a derribar los aparcamientos del aeropuerto construidos en pleno entorno natural.

Municipios y espacios afectados

El Consell Executiu, dos años después de la presentación de la propuesta para ampliar las zonas de protección, ha aprobado finalmente este martes el dibujo final. En el caso de la ZEPA, pasa de las 935 hectáreas que tenía hasta ahora a abrazar un área de 2.407 hectáreas dentro de los términos municipales del Prat, Viladecans, Sant Boi, Gavà, Santa Coloma de Cervelló, l'Hospitalet, Sant Vicenç dels Horts, Molins de Rei, Cornellà, Sant Joan Despí, Sant Feliu, Castelldefels y Barcelona. Entran al nuevo dibujo de la ZEPA y la LIC el tramo del río Llobregat desde el puente de la N-340 hasta la desembocadura, la Illa, la balsa de desagüe del canal de la aviación, la zona central del parque litoral del Prat, la playa del Prat, la Roberta, la colonia militar del aeropuerto, el pinar de las Filipines, la ampliación de Can Sabadell, la ampliación del Remolar, el Murtra y la Murtrassa, el pinar de Gavà y la Olla del Rei.

Finca de La Ricarda en el delta del Llobregat ACN
Finca de la Ricarda, en el delta del Llobregat / Foto: ACN

 

En espera de un plan de gestión

Aparte de rehacer las áreas protegidas, el Govern ha destacado un paquete de medidas acordadas "para plantear un nuevo modelo de gestión que no sea solo varias líneas marcadas en un mapa". En este sentido, el ejecutivo se propone empezar antes de que acabe el año la redacción y tramitación del Plan de protección de medio natural y del paisaje del espacio Delta del Llobregat, un documento históricamente reclamado por los agentes social y políticos locales. Al mismo tiempo, el Govern apuesta por crear un modelo de gobernanza compartido entre la Generalitat, el mundo local, agrario, ambiental y comunitario. Por ejemplo, plantea la posibilidad de que la Generalitat pueda adquirir terrenos que ahora están en desuso para destinarlos a cultivos, bien sea con licitaciones o bien con pago de servicios ambientales para la producción de alimentos.

Otra de las medidas planteadas al acuerdo de este martes es impulsar las ayudas públicas y las inversiones para que los productores agrarios del delta del Llobregat puedan modernizar las infraestructuras para optimizar la producción, en paralelo a un trabajo que favorezca la recuperación de la biodiversidad y la mejora de la calidad de las masas de agua.

El efecto en la ampliación del aeropuerto

Con respecto a la influencia que pueden tener la ampliación de las zonas protegidas ante un proyecto de ampliación del aeropuerto, la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, ha destacado que ahora "crece la exigencia y la necesidad de cumplir determinadas condiciones" si se quieren tocar estos espacios. En este sentido, ha recordado que la Comisión Europea "ya dijo que antes de plantear cualquier nueva ampliación había que cumplir con la Carta de Emplazamiento del 2021", cosa, añade, que ya se ha hecho ahora. Plaja ha admitido que el estado español podría pasar por encima de la preservación si presenta una propuesta de ampliación de que argumente una necesidad de interés general y que vaya acompañada de un paquete de medidas compensatorias con nuevos espacios protegidos. El nuevo dibujo, ha añadido, "blinda el modelo actual del delta y del aeropuerto".

Una vez anunciada la aprobación de ampliación de las zonas protegidas, ya se han oído las primeras voces en contra. Es el caso del Instituto Agrícola, que sostiene que el acuerdo, aprobado por un ejecutivo en funciones, no tiene el apoyo político mayoritario. Igualmente, el Instituto Agrícola critica que se haya consensuado el acuerdo, denuncia que no ha recibido respuesta a las alegaciones y califica de "contraproducente" la medida, al entender que no ajusta a lo que reclama la Comisión Europea".