La posible modificación de la Ordenanza de terrazas de Barcelona ha provocado una guerra abierta entre vecinos y restauradores que se ha visibilizado con la presentación de dos iniciativas ciudadanas, una por parte de la Federación de Asociaciones Vecinales de Barcelona (FAVB) y con voluntad restrictiva, que ha sumado más de 15.000 firmas, y otra presentada por el Gremi de Restauració, mucho más abierta, que ha sumado más de 26.000 firmas, entre acusaciones mutuas de irregularidades. Una vez validadas las dos iniciativas por parte del Ayuntamiento de Barcelona, que se tendrán que debatir en un próximo plenario municipal, la FAVB ha reclamado al Síndic de Greuges de Barcelona que haga un estudio comparativo de las dos propuestas.

De hecho, según señala la FAVB en un comunicado, esta federación vecinal ha invitado al Gremi de Restauració a hacer conjuntamente la petición a la sindicatura barcelonesa, pero como no ha obtenido ninguna respuesta, ha optado por presentar la petición en solitario, "convencidos de que la Sindicatura, con su intervención, podrá contribuir a enriquecer un debate necesario en el inicio de tramitación de las dos Iniciativas Ciudadanas". Según la FAVB, la Sindicatura, "conocedora de los problemas que comporta la Ordenanza en vigor, podrá analizar las soluciones que plantea cada una de las dos propuestas y aportar un análisis objetivo al debate".

Dos propuestas divergentes

Hay que tener en cuenta que la FAVB ha presentado la iniciativa ciudadana 'Por unas terrazas vecinales' donde se reclama un reparto justo del espacio público, usos que garanticen la movilidad y accesibilidad, horarios compatibles con la vida cotidiana y un régimen sancionador efectivo, y donde se propone una nueva ordenanza más restrictiva que la actual que implicaría cambios en las terrazas actuales para asegurar la accesibilidad y el derecho de paso de los peatones en la vía pública, así como horarios más restrictivos así como otros aspectos, como la prohibición de fumar.

Por su parte, el Gremi de Restauració ha presentado la iniciativa 'Nos vemos en las terrazas', que ha acumulado más firmas y que reclama una ordenanza más abierta donde se pide equiparar los horarios con los de otras ciudades de Catalunya, así como más flexibilidad a la hora de equiparlas con mobiliario y cambios en el régimen sancionador. Una vez validadas las dos iniciativas, que en los dos casos han comportado la reducción del número de firmas presentadas, estas siguen su tramitación, que comportará que se debatan, de forma conjunta o separada, en un próximo plenario municipal.