La plataforma vecinal Eixample Respira, que se significa por su voluntad de conseguir que el distrito del Eixample de Barcelona sea más saludable para los peatones por la vía de reducir el impacto del tránsito rodado, se reunió este jueves con el concejal del distrito, Jordi Valls (PSC), para presentarle su hoja de ruta, con medidas aplicables en un plazo de dos años, como los cambios en la frecuencia semafórica de la calle Aragó, y de otros a largo plazo, como la implementación de un peaje urbano que pagarían los vehículos privados que quieran entrar en la ciudad y la aplicación de los 30 kilómetros hora como velocidad máxima.
En un comunicado hecho público este viernes, Eixample Respira desgrana las propuestas "para la mejora del transporte público y la movilidad sostenible en el distrito del Eixample, con el objetivo de mejorar la salud y la calidad de vida del vecindario". Se trata de una hoja de ruta dividida en dos paquetes de medidas, el primero de los cuales se compone de propuestas que se podrían implementar en los próximos dos años sin necesidad de grandes inversiones, entre las cuales destaca la supresión de la onda verde de la calle Aragó, es decir la frecuencia semafórica que permite enlazar semáforos en verde para atravesar más deprisa el centro de la ciudad. En este aspecto, la plataforma pide "cambiar la frecuencia semafórica de la calle Aragó para evitar que se utilice como zona de paso y reducir la velocidad de los vehículos".
Otras medidas a corto plazo son la eliminación de estacionamiento de vehículos en el carril bus los fines de semana y festivos para hacer más efectivo el transporte público; la pacificación no solo de entornos escolares, sino también de hospitales y residencias de personas mayores; la creación de carriles bici en calles como Aribau, Muntaner y Entença; hacer efectivo el día sin coches, actualmente muy testimonial; ampliar el tiempo de paso de peatones en los semáforos de grandes avenidas para permitir cruzar en una sola fase sin correr, apto para los pequeños y las personas mayores, como en Aragó, Gran Via, Diagonal y avenida Roma; pacificación de todo el entorno de la plaza Catalunya, y la celebración de una "Navidad sin humos", con la pacificación de las zonas comerciales y de alumbrado durante las fiestas.
Propuestas de largo alcance
Como propuestas de largo alcance y con el objetivo de alcanzar la reducción de los niveles de contaminación a la mitad para 2030 para cumplir las directivas europeas, Eixample Respira propone la implementación de un peaje urbano; sacar las motocicletas de las aceras; alcanzar la Ciudad 30, y reformar las "grandes autopistas urbanas", empezando por Aragó y Gran Via. Asimismo, la plataforma vecinal ha hecho llegar al concejal del distrito su oposición a dos proyectos que afectan al Eixample, la exhibición de Fórmula 1 y las obras del parque de Joan Miró.