El distrito de Sant Andreu de Barcelona tomó su forma actual en el año 1984, fecha en que buena parte de su territorio histórico se emancipó para formar Nou Barris, cuando el Ayuntamiento de Barcelona aprobó la vigente división de la ciudad en diez entidades. Con casi 150.000 habitantes, Sant Andreu está compuesto actualmente por siete barrios y una configuración urbana que combina su pasado agrícola e industrial con un crecimiento acelerado durante la segunda parte del siglo XX que lo transformaron en un distrito moderno e innovador donde, con todo, pervive el casco antiguo de Sant Andreu de Palomar, el actual barrio que centra e identifica el distrito.

🏰 Un castillo falso, el antiguo mental, un puñado de acueductos y otros atractivos de Nou Barris

La historia reciente de este antiguo municipio, que fue agregado a Barcelona en 1897, se puede escribir con la memoria de sus actuales barrios, desde el núcleo original de Sant Andreu de Palomar hasta los barrios de casas baratas de Baró de Viver y el Bon Pastor, que no fueron Barcelona hasta 1945, pasando por la Trinitat Nova, para continuar por los barrios más próximos al centro de Barcelona: la Sagrera, el Congrés i els Indians y Navas, actualmente en lucha para cambiar el nombre del barrio. Si el distrito está formado por siete barrios, aquí van siete recomendaciones de puntos de interés, una por cada barrio.

Baró de Viver: Un mural para recordar la historia

El barrio de Baró de Viver fue anexionado a Barcelona junto con el del Bon Pastor el 1 de enero de 1945, ya que antes formaban parte de Santa Coloma de Gramenet y fueron urbanizados como barrios de Casas Baratas destinados a acoger a los chabolistas desalojados de Montjuïc con motivo de la celebración de la Exposición Internacional de 1929. En Baró de Viver, de las Casas Baratas ya no queda nada, pero sí que hay el Mural de Memoria, un proyecto de entidades y vecinos formado por una serie de paneles que a lo largo de unos 130 metros explica la historia del barrio, con hechos como la fundación en el año 1929, la riada de 1943, la anexión a Barcelona en 1945, la llegada del metro el año 1983 y la construcción del nudo de la Trinitat. Se inauguró el 11 de febrero de 2011 y, lamentablemente, su aspecto actual está muy desmejorado a causa del persistente vandalismo de los grafiteros.

El mural de memoria de Baró de Viver está compuesto por una serie de paneles situados en el paseo de Santa Coloma donde a lo largo de unos 130 metros se explica el origen y la trayectoria histórica de este barrio / Foto: AJBCN

El Bon Pastor: El museo de las Casas Baratas

La historia del barrio del Bon Pastor es paralela en la de Baró de Viver, pero con un epílogo diferente. También fue un barrio de Casas Baratas y fue anexionado a Barcelona en 1945, pero aquellas antiguas casitas no han desaparecido -ni han sobrevivido en su integridad como Can Peguera (Nou Barris)-. A medio camino entre un barrio y el otro, en el Bon Pastor se ha conservado una manzana de casas, que conforma el MUHBA Bon Pastor, con diez casas musealizadas, cuatro de las cuales muestran, con mobiliario de época, cómo se vivía en el barrio y como evolucionó el interior de las viviendas entre 1929 y 2017.

Una manzana de las antiguas Casas Baratas del Bon Pastor ha sobrevivido al derribo para convertirse en subsede centrada en vivienda del Museu d'Historia de Barcelona (MUHBA) / Foto: Carlos Baglietto

El Congrés i els Indians: Racionalismo entre galgos

El barrio del Congrés y els Indians está conformado, como su propio nombre indica, por dos vecindarios realmente diferenciados, el del Congrés, de bloques de edificios construidos con ocasión del Congreso Eucarístico de 1953, y el dels Indians, de urbanización anterior y formado por calles más estrechas y edificios más pequeños. Ahora bien, uno de los espacios más singulares es el antiguo Canòdrom, actualmente Ateneu d'Innovació Digital i Democràtica, que perdida su función como en pista de carreras de galgos, se ha reavivado reivindicándose como edificación racionalista de primer orden. Construido por Antoni Bonet y Josep Puig, hizo su función original entre 1964 y 2006. Destaca por la funcionalidad de sus formas y por la aparente paradoja de construir una construcción moderna para un espectáculo sórdido como las carreras (y apuestas) de perros.

La plaza del Canòdrom, que recuerda el antiguo trazado de la pista de carreras de galgos, está presidida por el edificio racionalista desde donde se apostaba y seguían las competiciones / Foto: Carlos Baglietto

Navas (el Torrent de la Guineu): Brutalismo en misa

El barrio de Navas está de actualidad gracias a la iniciativa vecinal que impulsa un cambio de nombre, para desligarse de la referencia a una batalla de la edad media y favorecer el de Torrent de la Guineu, en memoria de un antiguo curso fluvial que atravesaba el barrio. Más allá de este hecho, un atractivo del barrio es la iglesia de San Juan Bosco, en la plaza de Ferran Reyes y que refleja el espíritu del brutalismo en plena avenida Meridiana. Se trata de una iglesia colosal por sus formas, construida entre 1970 y 1974 por Francesc Escudero Ribot y Ricard Sancho Beltrán y que llama la atención desde cualquier ángulo que se mire. En los bajos de la iglesia se acaba de abrir el Mausoleu Metropolità de Barcelona.

La plaza de Ferran Reyes contiene la espectacular iglesia de San Juan Bosco, un ejemplo casi canónico del estilo arquitectónico brutalista aplicado a la construcción de recintos religiosos / Foto: Carlos Baglietto

La Sagrera: Obra cumbre del arte ibero

El barrio de la Sagrera, que hasta 1897 había formado parte del municipio de Sant Martí de Provençals, contiene una singularidad poco conocida. Uno de sus espacios de centralidad es la plaza de los Jardins d'Elx, que acoge en uno de los extremos la iglesia de Cristo Rey. Un conjunto de palmeras evoca la ciudad que da nombre a estos jardines, pero en el extremo que da a la calle Garcilaso hay un elemento que identifica claramente el espacio. Se trata de la célebre Dama de Elche, considerada como la obra cumbre del arte ibero. Bueno, se trata de una reproducción regalada por la ciudad de Elx, ya que el original, y a pesar de las peticiones ilicitanas, se encuentra en Madrid.

La plaza de los Jardins d'Elx contiene esta reproducción de la célebre Dama de Elche, un busto femenino considerado como la obra cumbre del arte ibero que se conserva en Madrid, a pesar de las demandas ilicitanas / Foto: Carlos Baglietto

Sant Andreu de Palomar: Centralidad cívica y religiosa

El barrio de Sant Andreu de Palomar es el meollo del distrito, y el meollo del meollo es la plaza Orfila, que reúne la vida cívica del barrio, con la presencia de la sede del distrito, situado en el mismo edificio donde anteriormente había habido el ayuntamiento de Sant Andreu, y la vida religiosa, con la iglesia de Sant Andreu de Palomar, identificable de lejos por su espectacular cúpula y que cuenta, en uno de los laterales, con la histórica Capella dels Segadors. La plaza Orfila mantiene su encanto de plaza de pueblo que siempre ha sido y es puerta de entrada al núcleo viejo de Sant Andreu de Palomar.

La sede del distrito de Sant Andreu, en la plaza Orfila, está situada en el mismo edificio donde anteriormente se ubicaba el Ayuntamiento del municipio independiente de Sant Andreu de Palomar, absorvido por Barcelona en 1897 / Foto: Carlos Baglietto
En el otro lado de la plaza Orfila se encuentra la iglesia de Sant Andreu de Palomar, coronada por una de las cúpulas más espectaculares de Barcelona. A la izquierda de la foto se encuentra la histórica Capella de los Segadores / Foto: Carlos Baglietto

Trinitat Vella: Modernismo hidráulico

El barrio de Trinitat Vella, coronado por el centro penitenciario, incluye un edificio modernista de interés, se trata de la Casa de l'Aigua de Trinitat Vella, que formaba un conjunto de instalaciones hidráulicas con la Casa de l'Aigua de Trinitat Nova y que, pese a no tener la misma presencia colorida, es igualmente destacable. Las dos casas están conectadas por un túnel por debajo de la Meridiana formando un complejo conjunto construido entre 1915 y 1919 por bombear, almacenar, depurar y clorar el agua captada en Montcada i Reixac. En la Trinitat Vella se encuentra el pabellón de bombeo y la Casa del Guarda.

Instalaciones de la Casa del Aigua de Trinitat Vella, de construcción industrial modernista y que está conectada con la vecina Casa de l'Aigua de la Trinitat Nova por un túnel -raramente visitable-, por debajo de la avenida Meridiana / Foto: Carlos Baglietto