Dos crías de jabalí se han paseado más de dos horas por la transitada Avenida Meridiana de Barcelona, en los alrededores de la estación de Renfe y Metro de la Sagrera, lo que ha obligado a su captura y posterior eutanasia según los protocolos. Testigos presenciales han explicado que los cochinillos de jabalí pululaban nerviosos y asustados por la acera, lado de montaña, de la Meridiana y que la gente se iba apartando a su paso. También, para reducir el riesgo de un accidente de tráfico, media docena de agentes de la Guardia Urbana ha hecho que los animales cruzaran la Meridiana hasta la plaza de Jardins d'Elx los han acabado capturando en la calle Garcilaso.
Fuentes del Ayuntamiento de Barcelona han explicado a EFE que la Guardia Urbana ha recibido el aviso pasadas las 7:30 horas y, como marca el protocolo, se ha activado el Servicio de Ecopatología de la Fauna Salvaje (SEFAS). "Los jabalíes, dos ejemplares, han sido capturados por los servicios veterinarios pasadas las 9:30 en la calle Garcilaso. Les han dormido con dardos, les han practicado la eutanasia y los han llevado a la UAB (Veterinàries), donde se hacen necropsias para determinar características, etcétera," han explicado las mismas fuentes.
Los jabalíes y las bacterias
Un estudio del Institut de Recerca i Tecnologia Agroalimentàries (IRTA) i del Servei d'Ecopatologia i Fauna Salvatge de la Universitat Autònoma de Barcelona (SEFaS-UAB) determina que los jabalíes que hay en torno al área metropolitana de Barcelona son portadores de bacterias intestinales resistentes en los antibióticos. Se trata del campilobacter y, en menor medida, de la salmonela, unos de los principales patógenos de transmisión alimentaria que circulan por Europa responsables de gastroenteritis en humanos. Con estos datos en la mano, los autores del estudio consideran que es necesario profundizar en la gestión de la fauna silvestre desde el punto de vista epidemiológico, con el objetivo de reducir los riesgos para la salud pública.
Los investigadores han analizado muestras fecales de 130 jabalíes del Parque Natural de la Sierra de Collserola, de la ciudad de Barcelona y del Campus de la UAB. Los resultados, publicados en un estudio de la revista Science of The Total Environment, denotan que más del 60% de los individuos muestreados tenían bacterias del género campilobacter, con las variantes C. lanienae en un 46%, la C. coli en un 16% y la hyointestinalis en un 1%. Todas las cepas bacterianas identificadas eran resistentes, como mínimo, a un tipo de antibiótico y en el caso concreto de la variante C. cuele el 67% eran multi-resistentes, es decir, presentaban resistencia a tres o más familias de antibióticos.
Crece la población
Con respecto a la salmonela, la prevalencia fue muy baja, con sólo cuatro individuos positivos. Sin embargo, también se detectaron cepas multi-resistentes y se aislaron los dos subtipos más frecuentemente causantes de salmonelosis en humanos. Los investigadores ponen de relieve que en los últimos veinte años ha crecido la población de jabalíes en el entorno metropolitano de Barcelona, pudiendo verse jabalíes en espacios públicos como calles, parques y jardines de los municipios más próximos al parque natural. Un aumento de población que se intenta frenar con batidas, instrumento que se ha puesto últimamente en entredicho e incluso se ha pedido que se detengan, después de que en enero un ciclista resultó gravemente herido mientras circulaba por el bosque a Argentona y recibió el impacto de una bala. En este sentido, los investigadores destacan que el hecho de compartir espacios entre jabalíes y personas puede hacer más transmisibles los patógenos, también con animales de compañía, motivo por el cual consideran que hace falta poner énfasis en el enfoque de Una Sola Salud para estudiar más a fondo el papel de los animales salvajes en la epidemiología de patógenos que se pueden transmitir de animales a personas y aplicarlo las medidas de gestión.