La calle Balmes, una de las más emblemáticas de Barcelona, que conecta la montaña con el mar, se reformará entre la plaza Molina y la ronda del General Mitre, en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi. El tramo que se transformará, de unos 600 metros, renovará una superficie de unos 15.000 metros cuadrados; las obras empezarán en otoño y tendrán una duración de 15 meses. El proyecto ha sido aprobado inicialmente por el gobierno municipal de Barcelona, con el objetivo de continuar con la transformación de la vía para ganar espacio a los peatones, con aceras más anchas y aumentando la superficie verde, con el fin de incrementar la conectividad entre los barrios de Sant Gervasi-Galvany y el Farró y dar continuidad a la remodelación que ya ha vivido la calle desde la Gran Vía hasta la plaza de Molina. El presupuesto de las obras será de unos 7 millones de euros.
Tres carriles de circulación en total
El proyecto aprobado contempla que las nuevas aceras tendrán una anchura media de 4,35 m a cada lado, de manera que crecerán en 1,90 m con respecto al tamaño actual. Esta nueva configuración permitirá disponer de más espacio para el paseo y plantar unos 110 árboles nuevos en alineación. Para poder hacer crecer las aceras, la calzada se reduce de los 15 m de anchura actual a 11,20 m. De este modo, se pasará de los dos carriles de circulación por sentido actuales a tener tres en total: dos de subida en sentido montaña —uno para el tráfico privado y uno compartido para buses y tráfico privado— y uno de bajada en sentido mar para buses y tráfico privado. Además, habrá un carril de servicios en lo tocante a la acera Besòs con unos 130 m lineales de plazas de carga y descarga, 147 plazas de aparcamiento para motos, 4 plazas de aparcamiento para vehículos de personas con movilidad reducida, paradas de bus y contenedores.
Nuevos pasos de peatones
Para facilitar los desplazamientos se harán nuevos pasos de peatones en plaza Molina, en Sant Hermenegild-Copèrnic lado mar y en Pàdua lado montaña, y también se harán aceras pasantes en los cruces con la calle de Putxet, el de la calle Sant Hermenegil-Copèrnic, y el de Francolí. Además, se renovará la pavimentación de todo el ámbito y se mejorará el sistema de recogida de aguas.
Este proyecto de reforma de la calle de Balmes entre la plaza de Molina y la ronda del General Mitre actualiza uno de los dos tramos del proyecto ejecutivo que elaboró el Ayuntamiento 2017 y 2018, que comprendía la reurbanización de Balmes desde la plaza Molina hasta la plaza de Joaquim Folguera. El segundo tramo, desde la ronda del General Mitre hasta la plaza de Joaquim Folguera, se afrontará una vez lo permitan las obras de la Línea 9 del Metro a la estación del Putxet y se disponga de dotación presupuestaria.