La líder de Ciutadans en el Ayuntamiento de Barcelona, Carina Mejías, y la mano derecha de la alcaldesa Ada Colau, el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, han protagonizado una disputa en la comisión de Economía y Hacienda del Ayuntamiento, que ha acabado en un fatal desencuentro.
El enfado de Mejías se ha producido a última hora de la tarde del martes en la citada comisión, donde la líder de Ciutadans ejerce de presidenta. El primer teniente de alcalde tenía que responder a una pregunta formulada por el concejal de Cs Francisco Sierra. Mientras Pisarello intentaba responder, la concejala de la formación de Albert Rivera ha estallado contra él, acusándose de actuar con "falta de interés".
"Todas estas actitudes son de vergüenza ajena", ha soltado Mejías a Pisarello. La líder de Ciudadanos ha asegurado que "nunca" había visto una actitud igual a la mostrada por el número dos de Colau. "Estas actitudes no son propias de miembros del gobierno", ha expuesto, lo que ha provocado el concejal de Comercio y Mercados, Agustí Colom, saliera en defensa de Pisarello. Mientras este intentaba hablar, Mejías se ha levantado y ha dicho: "Esta presidenta se va" y se ha justificado con que no podía soportar más la actitud del gobierno municipal.
Ante la escena, Pisarello ha asegurado que Mejías quería dar un "espectáculo" y ha llegado a decir que parecía una "maestra de colegio autoritaria".
El PDeCAT ve "machismo"
La discusión tiene una lectura clara para el PDeCAT que, al margen de la reacción de Mejías, ha tachado de "machista" la comparación de Pisarello con una profesora de colegio. "Denunciamos este episodio lamentable y la desídía de Pisarello ante la Comisión", han expuesto los de Xavier Trias a través de Twitter, desde donde han remarcado también el "menosprecio" mostrado por el primer teniente de alcalde.
Tras el episodio, a última hora de la noche, Mejías ha pedido disculpas por el tenso episodio "al resto de miembros de la comisión". Ahora bien, ha insistido que la actitud del gobierno barcelonés con los grupos de la oposición son "inaceptables".