Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) implantará este verano una innovadora prueba piloto de regulación inteligente de la ventilación de la red de metro de la capital catalana para mejorar la calidad ambiental y evitar contagios de coronavirus, además de mitigar el calor en las estaciones.
El proyecto de digitalización se ha desarrollado junto con la ingeniería SENER, que ha aportado su sistema de control denominado RESPIRA, y arranca de un trabajo previo hecho en la línea 1 del metro de Barcelona, donde verificaron la importancia de un control dinámico de la ventilación que consiguió rebajar la temperatura ambiente.
Se aplicará la inteligencia artificial
RESPIRA es una plataforma de inteligencia artificial capaz de mejorar la sensación térmica del pasaje y de los trabajadores del metro a partir de la definición de varios criterios y de la lectura de variables en tiempo real, como la temperatura, la humedad, la calidad del aire interior en las estaciones y el consumo eléctrico. Con estos datos, un algoritmo dinámico de predicción de las condiciones ambientales en el interior de las estaciones se encarga de aplicar un modo de funcionamiento a cada ventilador para mejorar la sensación térmica y optimizar el consumo energético.
Las líneas convencionales del metro de Barcelona (de la 1 a la 5), que transportan el 94% del pasaje, serán las que pondrán a prueba esta regulación avanzada de la ventilación a partir del próximo mes de julio. Actualmente, el Metro está haciendo las tareas previas: adaptar los programas de control y regulación de todo el parque de ventilación de la red convencional (187 ventiladores de estación y 142 ventiladores de túnel), desarrollar nuevas funcionalidades en el telemando de instalaciones fijas y equipar una parte de la red con sensores de temperatura y humedad.
Evitará contagios de Covid-19
Con el control inteligente de la ventilación se conseguirá la máxima entrada de aire fresco procedente del exterior, una medida que permitirá aumentar la higiene dentro de la red de metro y reducir el riesgo de proliferación de la Covid-19 y varios microorganismos, de acuerdo con las orientaciones de las autoridades sanitarias.
Para el director de la red de Metro, Ramon Bacardí, se trata de un "buen ejemplo de aplicación de las tecnologías en beneficio de la mejora de la calidad del servicio y con un efecto directo sobre la experiencia de viaje del cliente". Además, destaca "la contribución que puede hacer el sistema de ventilación por proporcionar un ambiente de seguridad y confort a la red de metro en un momento en qué estamos recuperando pasaje y necesitamos, por sostenibilidad y por equidad social, que el transporte público vuelva a ser visto como la mejor opción para la movilidad metropolitana en el área de Barcelona".