El Transporte Público de Barcelona da un paso más adelante hacia la modernización tecnológica del servicio para facilitar la información a los usuarios. A partir de ahora, se instalarán 770 pantallas de información a las líneas convencionales —L1, L2, L3, L4, L5— donde se incluirán detalles más exhaustivos y claros, como el tiempo de llegada del próximo tren, según ha informado TMB. La actualización de los dispositivos tendrá un presupuesto total de 5,2 millones de euros para actualizar las pantallas en un total de 128 estaciones hasta el 2025, que cuenta con financiación europea. Las pantallas estarán situadas en los andenes y en los vestíbulos de las líneas del metro. La actualización de los dispositivos está en fase de pruebas a dos estaciones de la línea 5 de metro, en concreto en Can Boixeres —en el andén y vestíbulo— y en Cornellà Centre —en el andén.
Mejora del servicio del metro
Las nuevas pantallas digitales facilitan el aumento de los tipos de mensajes que se difunden, mejoran la legibilidad y se adaptan a las necesidades del servicio. Así pues, podrán transmitir diferente tipo de contenidos, aunque, priorizando siempre la información de servicio, pero también incluyendo el contenido corporativo y comercial. Además de la hora, el sentido de paso de cada andén, y el tiempo de espera para los próximos 2 trenes, también se indicarán las incidencias o alteraciones, y se espera que en el futuro también se informe sobre la ocupación de los diferentes trenes y la disponibilidad de los ascensores, entre otras informaciones.
La gran mayoría de las pantallas tendrán unas dimensiones similares a las actuales, de casi 50,'' aunque, habrá algunas de 55'', que se pondrán en algunos vestíbulos de paradas convencionales. En concreto, distribuirán 531 pantallas de doble cara en los andenes, 199 pantallas de una cara y 40 TFTs que serán los mayores (55). Tal como hasta ahora, las pantallas de los andenes estarán colgadas del techo y se podrá ver por los dos lados, en cambio, en los vestíbulos y pasillos serán simples, ya que se instalarán en la pared. Se incluirán pictogramas que ayudan a descodificar rápidamente los mensajes, como el símbolo del ascensor, el icono de peligro para anunciar obras o avería, los símbolos en color de las líneas de metro. Una de las grandes novedades es la incorporación de color para ayudar al contraste en la lectura y se establecerá un color diferente según la tipología de la incidencia: el amarillo asociado a las alteraciones e incidencias; el azul para las obligaciones y el verde para las recomendaciones.