El proyecto del Ayuntamiento de Barcelona de situar en los Jardins del Baix Guinardó (Horta-Guinardó) la carpa provisional que tiene que permitir la reforma integral del Mercat de l'Estrella, situado en la calle de Pi i Margall (Gràcia) y que necesita una reforma total, ya que el edificio acumula patologías constructivas y se tiene que demoler, cuenta con la oposición frontal de vecinos y usuarios del parque, que en varias ocasiones, y este mismo viernes también, han hecho oír su voz en contra de un proyecto que supondrá afectar el parque, principalmente su estanque, pero también todo el entorno, por donde tendrán que entrar y salir los camiones y que comportarán también eliminar las zonas de recreo infantil.
La colocación del mercado provisional sobre la zona del estanque fue un comodín que el Ayuntamiento se sacó de la manga como último recurso después de haber desestimado inicialmente situar el mercado en estos jardines. Ahora, el Ayuntamiento trabaja con el calendario de licitar la construcción del mercado provisional a finales de año para sacar adelante el traslado una vez sea posible hacerlo, para encarar el derribo y construcción del nuevo mercado, unas obras que se alargarían un mínimo de tres años. El proyecto cuenta con la oposición vecinal, reunida en la plataforma Salvem el Parc del Baix Guinardó, que tiene la intención de llevar el caso a la justicia.
Ahora bien, la desaparición del estanque y la ocupación de buena parte del parque durante un mínimo de tres años no solo afectará a los vecinos y usuarios de esta zona verde del barrio del Baix Guinardó, sino también a dos colectivos de usuarios del estanque, uno humano, ya que se trata de un punto de encuentro de aficionados al modelismo naval que hacen evolucionar sus barcos sobre el agua; y uno animal, ya que el estanque es zona de nidificación de patos y recientemente han nacido una docena de patitos que aportan un plus de naturaleza que llama la atención de los ciudadanos en una zona rodeada de edificios.
Modelistas navales: "Nos tendremos que buscar la vida"
Toribio Alonso y Lluís Castells son dos aficionados al modelismo naval que se encuentran los viernes en los Jardins del Baix Guinardó para hacer evolucionar sus modelos sobre el agua, aparte de que algunos domingos participan en encuentros con más concurrencia. Este mismo viernes se han presentado, pero a causa de la situación meteorológica solo se ha podido ver un aerodeslizador de factura casera, ya que otros barcos como los veleros son mucho más sensibles a la lluvia. Para ellos, el estanque de los Jardins del Baix Guinardó es un espacio "ideal" para su afición, ya que se trata de un lugar que les da la facilidad de acceso sencillo a la lámina de agua.
En este sentido, Castells apunta que aparte otros sitios como el parque Catalunya de Sabadell, donde se encuentran el último domingo de mes, en Barcelona mismo solo disponen de dos espacios donde hacer navegar sus modelos, esta zona verde del Baix Guinardó y el parque de la Espanya Industrial, en Sants, donde el acceso a la lámina de agua, en todo caso, "es más complicado", además de estar actualmente rodeado de las obras de ampliación de la estación ferroviaria de Sants. La única pega que le encuentran al estanque del Baix Guinardó es su "poca profundidad", ya que les impide hacer navegar grandes veleros a causa del tamaño de sus quillas, que pueden llegar a los 80 centímetros.



"Nos tendremos que buscar la vida", apunta Castells, ante la situación con que se encontrarán los aficionados al modelismo naval que utilizan este estanque, porque "aunque dicen que será por tres años, al final serán cinco o seis", para añadir que "no solo nos quedaremos sin estanque, sino también sin parque", ya que los dos aficionados, además, son vecinos de la zona. Alonso, por su parte, apunta que sin poder hacer funcionar sus modelos "será más difícil la jubilación", apuntando que ya habrá pasado de los 80 años una vez se restablezca esta zona verde a su estadio actual.
Para los aficionados al modelismo naval, que se reúnen en varios clubs y que suman más de 500 personas en Barcelona y alrededores, "la falta de espacios" es uno de los problemas recurrentes, aunque apuntan que, en principio, no hay problemas para utilizar sus barcos en los parques y jardines de Barcelona. Ahora bien, se encuentran con que cada vez hay menos espacios para hacerlo, y menos con la actual situación de sequía. Espacios como el parque Central de Nou Barris o el parque de la Creueta del Coll no los consideran adecuados, por dimensiones y calado, y por eso lamentan perder el estanque de los Jardins del Baix Guinardó como mínimo, durante tres años, que podrían ser alguno más.
Doce patitos que ya son once
Además de los modelistas navales, el estanque también es utilizado por patos, que han nidificado en varias ocasiones, la última de las cuales, esta misma semana. A principios de semana aparecieron una docena de patitos que acababan de salir del huevo, haciendo su primer baño en el estanque siempre al abrigo de su madre. El miércoles se contaron doce patitos, pero el viernes ya solo eran once, ya que uno no habría sobrevivido al ataque de una gaviota, según apuntan algunos vecinos. El hecho es que la presencia de los patitos interesa a los visitantes y, cuando salen del nido para entrar en el estanque enseguida hay gente siguiendo sus movimientos, incluso en un momento de navegación de barcos, sin molestarse los unos a los otros. La desaparición del estanque supondrá, pues, perder una zona de nidificación de estas aves.


Imagen principal: Lluís Castells y Toribio Alonso, dos habituales de los encuentros de modelismo naval los viernes en el estanque de los Jardins del Baix Guinardó / Foto: Montse Giralt