El Monestir de Pedralbes, en Barcelona, ha iniciado un proyecto de investigación, restauración, conservación y difusión de varias sepulturas del siglo XIV, la etapa fundacional de la construcción. Se trata de un estudio multidisciplinar de los nichos ubicados en el interior de la iglesia y el claustro donde intervienen expertos en arte, antropología, arqueología e historia, y abarcará diferentes aspectos de la sociedad medieval de Catalunya. Durante el proceso, se estudiará el sepulcro de la reina Elisenda de Montcada, entre otros.

La abertura de las primeras tumbas se ha realizado durante el último tercio del 2024 y el próximo año se analizarán los materiales presentes en estas, además de abrirse las restantes. Los resultados se publicarán en el 2026, según las previsiones, coincidiendo con el séptimo centenario de la fundación del monasterio y culminando 700 años de historia protagonizada por mujeres, ya que se construyó para albergar una comunidad de monjas.

El director de Patrimoni Cultural de l'Institut de Cultura de Barcelona, Jaume Muñoz, ha declarado en un comunicado que "estamos iniciando un proceso ambicioso y de largo recorrido que nos permitirá conocer a los fundadores del monasterio". El director ha destacado la complejidad de la intervención, un aspecto que puede observarse en la variedad de especialistas que trabajan en la restauración, de ámbitos tan diversos como la historia del arte o la medicina forense. También en el lapso de tiempo necesario para poder completarla, ya que el proyecto comprende varias fases de intervención en las tumbas, desde la excavación antropológica hasta los estudios en el laboratorio y la restauración.

Para estudiar de manera ordenada todos los elementos en el laboratorio, el jefe de la sección arqueológica, Josep Maria Vila, ha explicado que se analizarán los elementos textiles de los restos para entender el contexto de la información y dar motivo a otros estudios complementarios. Asimismo, la directora del monasterio, Anna Castellà, ha destacado la importancia de conocer la vida de las mujeres que lo construyeron: "Queremos recuperar los restos de esta primera comunidad para saber quiénes eran estas mujeres, como vivían y como era el mundo femenino hace 700 años".

El estudio de los restos humanos

Con respecto a la fase de restauración, la tercera y última, el responsable, Javier Chillida, ha subrayado la importancia del control climático de los restos de los sepulcros y de llevarlos al laboratorio con seguridad. En este sentido, la doctora en biología humana Carme Rissech, ha explicado que el estudio de los restos humanos es muy importante, ya que son "evidencias directas" de las poblaciones pasadas y permiten corroborar los datos históricos existentes y ampliarlas o corregirlas. El proyecto de investigación permitirá el análisis de varios aspectos de la sociedad medieval de Catalunya, como la vida en el monasterio del siglo XIV, las pautas de alimentación, la vida cotidiana, la muerte y la percepción de la mujer a la edad media.