El año 1326 el rey Jaume II y su esposa, Elisenda de Montcada fundaron el monasterio de Pedralbes y el 3 de mayo de 1327 fue inaugurado. En el convento siempre ha vivido una comunidad de monjas clarisas, que en sus inicios albergaba, principalmente, hijas de nobles, y es más, la misma reina Elisenda hizo construir un palacio anexo donde se trasladó cuando murió Jaume II. Todavía hoy en día hay monjas clarisas en el monasterio, pero eso dejará de ser así dentro de unas semanas. Sor Inmaculada, sor Pilar y sor Isaura, de 90, 73 y 66 años, son las tres únicas monjas clarisas que todavía viven allí, pero está previsto que en febrero se marchen las tres y se instalen en la orden de Santa Clara que hay en el monasterio de Vilobí d'Onyar. Después de casi 700 años, las monjas clarisas ya no habitarán en el monasterio de la capital catalana.

WLM14ES Claustro Real Monasterio de Pedralbes, Les Corts, Barcelona MARIA ROSA FERRE (9) wikipedia
El monasterio de Pedralbes

Tal como explica El Periódico, la marcha de las tres monjas se debe a la falta de efectivos, o, cosa que es lo mismo, la falta de vocación. Como no hay relevo ni monjas jóvenes que puedan acompañar las que ahora viven allí, las tres monjas han decidido pedir al traslado a Vilobí. No estaban en posición de poder mantener las obligaciones de la vida contemplativa", explican fuentes del monasterio al citado diario. Estas mismas fuentes, sin embargo, no quieren decir qué pasará con el monasterio a partir de ahora: "Primero las personas, después los inmuebles", indican

Una salida voluntaria

El pasado 10 de enero se creó una recogida de firmas en Change.org para "evitar el desalojo de las últimas monjas clarisas del monasterio de Pedralbes". Ante eso, la orden de Santa Clara quiere aclarar que las tres monjas se marchan porque quieren y no por ningún otro motivo, como da a entender la recogida de firmas, que este miércoles tiene cerca de 800 firmantes.

El texto de la petición destaca el papel de las monjas y subraya que "no se limita solo a la esfera religiosa, sino que también han sido un ejemplo vivo de cómo las mujeres han contribuido a la preservación de la cultura a lo largo de los siglos". "Su desalojo no solo representa una pérdida material, sino también la desaparición de un símbolo de la lucha y la dedicación femenina en la historia", denuncia este texto. Sin embargo, la orden de Santa Clara insiste en que las monjas se marchan por voluntad propia y que serán acogidas "con toda calidez" en Viloví d'Onyar. Se trata, explican, de tres mujeres de edad avanzada y añaden que es preceptivo que las comunidades de los monasterios tengan al menos cinco monjas.