El activista vecinal Joan Termes i Roig, especialista en la historia del transporte público, defensor de la integración de las personas discapacitadas en la sociedad e impulsor de un Museu del Transport en Barcelona, ha muerto este martes por la mañana a la edad de 82 años, según ha informado la Coordinadora Pro Museu del Transport de Barcelona, entidad que el mismo Termes presidía y que lo ha definido como "luchador vecinal, medalla de oro de la ciudad y gran defensor del patrimonio del transporte de la ciudad". Termes fue galardonado el año 2005 con la Medalla de Honor de Barcelona.

Nacido en Sant Andreu de Palomar pero vinculado históricamente a Horta, Termes trabajó a lo largo de su vida en favor de la integración de las personas discapacitadas, al frente de la Vocalía de Discapacitados de la Asociación de Vecinos de Horta. Padre de dos hijos discapacitados, él mismo impulsó la vocalía a raíz de las carencias de equipamientos asistenciales y sociales para este colectivo. Su lucha social se centró en la denuncia de las barreras arquitectónicas en ámbitos como los equipamientos sanitarios y sociales, así como los comercios y el transporte público, y formó parte del Consejo de Discapacitados de Horta-Guinardó, de las comisiones de Participación Ciudadana, Urbanismo y Transportes del Instituto Municipal de Personas con Discapacidad del Ayuntamiento de Barcelona y de la Junta Directiva de la Federació d'Associacions de Veïns de Barcelona (FAVB).

Joan Termes, primero por la derecha, en la presentación de la Coordinadora Pro Museu del Transport de Barcelona / Foto: Jordi Palmer

Especialista en historia del transporte público y gran conocedor de la red actual e histórica, en especial del tranvía, términos presidía la Coordinadora Pro Museu del Transport de Barcelona, una entidad presentada en febrero pasado y que promueve el establecimiento de un museo dedicado al transporte en el espacio ferial de Montjuïc, una posibilidad que, de momento, no tiene el visto bueno del Ayuntamiento de Barcelona.

En la presentación de la coordinadora, Termes defendió un proyecto "de museo, no de mausoleo", en el sentido que ese futuro museo sea un "espacio dinámico", donde se pueda hacer "el mejor museo de Europa", ya que para trabajar en el proyecto se han podido coger ideas de grandes museos como los de Londres o Glasgow, entre otros. Asimismo, hizo mención del papel "formativo" que podría tener el museo para alumnos de formación profesional que podrían "aprender oficios y al mismo tiempo restaurar los vehículos históricos". Termes defendió también la oportunidad de aprovechar un espacio "en la plaza Espanya y con la centralidad que tiene". "Pondremos Barcelona en el mapa de los museos del transporte de Europa", concluyó Termes como declaración de intenciones de los proyectos de la coordinadora.