La conexión de los barrios de Vallcarca (distrito de Gràcia) y el Putxet (Sarrià-Sant Gervasi) mejorará a partir del próximo martes, 15 de febrero, una vez entre en servicio un nuevo ascensor de conexión que lleva también hasta el vestíbulo de la estación de Metro de Vallcarca de la línea 3, salvando un importante desnivel en una zona donde hasta el momento no había ningún ascensor, y que sólo se podía salvar a través de las escaleras y rampas de los jardines de Manuel Blancafort o bien haciendo uso de las escaleras automáticas que conectan las dos bocas de Metro, una situada en la avenida de Vallcarca y la otra en la avenida de la República Argentina.
Según ha informado el distrito este viernes, ya ha finalizado la segunda fase de las obras por adaptar la estación de Vallcarca (L3) a las personas con movilidad reducida. Las obras han consistido en la construcción de un ascensor de tres paradas que permitirán entrar al vestíbulo tanto desde el barrio del Putxet como del de Vallcarca. Además, también se incluye la edificación de una pasarela que dará acceso al ascensor desde la avenida de la República Argentina. Por otra parte, se han urbanizado parcialmente los jardines de Manuel Blancafort, y se ha creado un nuevo tramo de escalera de acceso. Estos trabajos completan la mejora de la accesibilidad a la estación, una actuación que finalizó su primera fase el verano de 2019. Entonces, la Generalitat invirtió 1,7 millones de euros para instalar dos ascensores con el fin de comunicar el vestíbulo y los andenes de la estación. En esta segunda fase, el gobierno catalán ha invertido 1,1 millones de euros.
Cortes en la L5 por Semana Santa y el verano
Mientras esta obra de mejora de accesos a la estación de Vallcarca de la L3 llega a su final, ya se prepara el importante corte que afectará a la L5 del Metro durante la Semana Santa y el verano con el objetivo de cambiar la vía entre las estaciones de Sagrera y Horta e impulsar otras medidas que minimicen las vibraciones al paso de los convoyes, además de extraer el amianto todavía existente a la estación de Maragall. Con una inversión prevista de 15 millones de euros, los objetivos principales de toda la operativa son la renovación integral de la vía en el tramo Sagrera - Horta, que se construyó el año 1960, resolvió los problemas de vibraciones existentes en este tramo y también en el que va de Verdaguer a Sagrera y extrajo el material con contenido de amianto de Maragall, todo con la finalidad de preparar la L5, que supone el 26% de utilización de la red de Metro, para una mejora de las frecuencias de paso.
La primera fase de afectaciones tendrá lugar durante la Semana Santa, en concreto entre los días 9 a 18 de abril -de hecho, todo el periodo de vacaciones escolares- y comportará que quedará sin servicio el tramo entre las estaciones de Verdaguer y Virrei Amat. Por lo tanto, durante esta semana larga, la L5 ofrecerá servicio, de una parte, de Cornellà Centre a Diagonal y por la otra, de Vilapicina a Vall d'Hebron. El objetivo principal de esta primera fase es asegurar la operatividad máxima de la estación de Sagrera durante el paro del verano. Además, se trabajará en la reducción de vibraciones en esta zona y en la apertura de un pozo de extracción de materiales a Sagrada Familia.
Entre el 9 de julio y el 10 de septiembre es cuando se efectúe el grueso de la obra principal, el cambio de vía en un tramo de tres kilómetros entre Sagrera y Horta, que se hará en dos subfases. La primera, entre el 9 de julio y el 7 de agosto comportará la suspensión del servicio entre Congrés y Vilapicina, de manera que, por una parte, habrá servicio entre Cornellà Centre y Sagrera, y por la otra, entre Horta y Vall d'Hebron. La segunda fase será entre el 8 de agosto y el 10 de septiembre y sumará al tramo afectado la estación de Horta, de manera que por esta lado sólo habrá servicio entre las estaciones de Carmel y Vall d'Hebron.