El Hopsital de la Vall d'Hebron contará con un nuevo edificio el año 2026. El nuevo complejo tendrá un total de diez plantas y permitirá atender a un millón de pacientes cada año, en un centro de atención hospitalaria que aglutinará todos los servicios ambulatorios, excepto los pediátricos. El futuro edificio de 46.210 metros cuadrados se levantará al otro lado de la Ronda de Dalt, al lado mar, justo delante del Hospital General. El comienzo de las obras está previsto que sea en el 2024 y estará acabado dos años después. El horario de las consultas se ampliará de 8 de la mañana en 8 de la noche, con el fin de facilitar la conciliación laboral de los pacientes.
El edificio de atención ambulatoria Vall d'Hebron alojará 250 consultas, 100 gabinetes, 100 plazas de Hospital de Día, unidades de soporte al diagnóstico y al tratamiento, unidades de farmacia ambulatoria y un área de rehabilitación, además de los espacios de soporte como espacios administrativos, de informática y de trabajo para profesionales. El proyecto forma parte del nuevo Vall d'Hebron, una transformación ambiciosa que no solo implica mejorar las infraestructuras y los equipamientos del Vall d'Hebron Barcelona Hospital Campus, sino que supone una transformación organizacional y competencial de los profesionales, así como intensificar la colaboración con la atención primaria y las instituciones presentes en el área de referencia territorial.
Concentrar recursos al actual Vall d'Hebron
Trasladar la actividad ambulatoria del Hospital Universitario Vall d'Hebron, que cada año moviliza un millón de visitas, a las nuevas consultas supondrá una modificación radical del flujo de pacientes. Una vez el nuevo edificio esté en funcionamiento, el Hospital concentrará recursos para la hospitalización y la actividad quirúrgica y mantendrá la parte más compleja de las unidades de diagnóstico y laboratorio. Solamente el Hospital Infantil preservará la práctica totalidad de las consultas actuales, recientemente renovadas. El edificio forma parte del proyecto de renovación de todo el complejo hospitalario que está previsto que finalice en el 2028, con un coste total de 270 millones de euros.
El conseller de Salut, Josep Maria Argimon, ha asistido este miércoles a la presentación del proyecto y ha destacado que este edificio se ha diseñado "pensando en una visión diferente", con una nueva mirada a la atención ambulatoria, y que este proceso de renovación refleja "elementos de optimismo" para avanzar al nuevo Vall d'Hebron. Por su parte, Mari Àngels Barba, directora de Enfermería del Hospital Universitario Vall d'Hebron, ha subrayado que los cambios en el modelo de atención que propiciará el nuevo edificio de Vall d'Hebron suponen una "oportunidad de trabajo en equipo interdisciplinario, acompañado de una intensificación del rol de las enfermeras a las consultas con el fin de dar respuesta a las necesidades asistenciales actuales de los y las pacientes".
Un edificio moderno pensado para el futuro y para las personas
"El espacio urbano conectará de forma directa y accesible con el nuevo edificio y el resto del Campus Vall d'Hebron. Se tratará de una nave diáfana sin pilares, flexible y adaptable que podrá cambiar, crecer y adaptarse en el futuro," explica el arquitecto Diego Nakamatsu, responsable del nuevo edificio. Las consultas externas, gabinetes de exploración y hospitales de día se plantean con amplios espacios, auténticas plazas de espera con luz y ventilación natural y con vistas en el mar y en Barcelona. Los grandes patios bioclimáticos permitirán la entrada de luz natural. Las medidas de producción y de ahorro de energía aplicadas al edificio siguen el modelo de arquitectura sostenible, verde, consciente y respetuosa.
Las consultas se distribuirán en torno a grandes vestíbulos y cada una dispondrá de un back office, un espacio multidisciplinar pensado para facilitar el acceso directo a la consulta de profesionales de diferentes especialidades, que son las que se desplazan, sin necesidad que el paciente que requiere su atención se mueva. Las nuevas consultas están orientadas a facilitar un cambio de modelo asistencial, dirigido a promover que los pacientes que necesitan un abordaje multidisciplinar por parte de diferentes equipos sanitarios puedan ser atendidos en una misma jornada. Este abordaje, más por problemas de salud que por especialidades, sitúa al paciente en el centro y hace que los profesionales sanitarios se adapten a sus necesidades, más que el paciente al funcionamiento de la institución sanitaria de la cual requiere atención.