Situar en un plano una red de transporte combinada de varios operadores y hacerlo de forma sencilla y comprensible es un reto que los gestores de transporte tienen que ir actualizando a medida que la red crece o gana en complejidad. En esta situación, la Autoridad del Transport Metropolità (ATM) de Barcelona ha rediseñado y puesto a disposición de los operadores un nuevo plano ferroviario del área de Barcelona, que mejora su diseño y modifica la estructura para adaptarlo a las próximas incorporaciones de paradas y líneas que ampliarán la oferta global de transporte público. Este nuevo plano para Rodalies, Metro, FGC y Tram ya se ha empezado a ver en estaciones de Metro estos últimos días.
🚇 Cinco planos alternativos del Metro de Barcelona
Según ha notificado la ATM este martes, el detonante de este nuevo plano ha sido la necesidad de dar respuesta a retos futuros, como la unión de los tramos sur y norte de las líneas L9 y L10, la prolongación de las líneas L1, L3 y L8 —este ya en marcha— y la unión del tranvía por la Diagonal, a pesar de que las futuras estaciones todavía no se mostrarán en el nuevo plano hasta que estas estén plenamente operativas y en servicio, pero sí que ya está preparado para poner los nombres una vez funcionen. El nuevo plano ya es una realidad en la red de Rodalies y del TRAM y se está actualizando en TMB y FGC.
De esta manera, todos los accesos, vestíbulos y andenes de estos operadores expondrán este nuevo diseño global más completo que incorpora las seis coronas tarifarias, dejando de mostrar en alguno de los casos el mapa reducido de la primera corona de Barcelona. Esta nueva versión ha sido rediseñada de la mano de los cuatro operadores ferroviarios y ha contado con el asesoramiento del diseñador y arquitecto Jug Cerovic.
Un nuevo plano más simple, utilizable y accesible
El nuevo plano incorpora diferentes mejoras en su diseño, siguiendo los criterios de simplicidad, usabilidad y accesibilidad. Con el fin de favorecer la comprensión, se ha reducido el grado de información de algunas líneas, alejándolo un poco de la cartografía real y simplificando los trazados. Eso ha repercutido en una mejor convivencia entre líneas y, por lo tanto, en una mejora cognitiva en la lectura. A menudo, la gran cantidad de líneas en la primera corona tarifaria puede llegar a dificultar la correcta distinción entre operadores, ya sea por la estrecha convivencia de los cuatro servicios ferroviarios en un espacio reducido o por la semejanza entre algunos colores de línea. Con el fin de encontrar una solución, se ha asignado un trazo diferente para cada modo de transporte con el fin de simplificar la lectura y reducir el grado de confusión.
- El servicio de metro queda representado con un trazo sólido.
- El tranvía utiliza un trazo doble que lo hace único e identificable a simple vista.
- En el caso del servicio de cercanías (Renfe y FGC) sus trazos pierden protagonismo cuando están en la primera corona, para mostrar en detalle su recorrido, con el fin de no generar confusión con el servicio de metro. Al salir de esta zona, aumentan de grosor ganando notoriedad.