La Associació de Dones Sant Josep, organizadora de la Papanoelhada Motera -con 'lh', porque se hace en l'Hospitalet de Llobregat- ha salido al paso de la intención del Síndic de Greuges de Barcelona de forzar la prohibición del acontecimiento a causa de los problemas de movilidad y de conducción negligente que ha provocado en otras ocasiones, y ha asegurado que, como entidad organizadora, en colaboración con el Ayuntamiento de l'Hospitalet de Llobregat, no tienen nada que ver con los comportamientos que les atribuye la sindicatura. Montserrat Arroyo, presidenta de la asociación, ha afirmado, en declaraciones a ElNacional.cat, que la Papanoelhada es "una concentración estática y solidaria", y que, por lo tanto, no incluye ningún recorrido en moto.
La Associació de Dones Sant Josep es, según relata Arroyo, una entidad feminista formada por mujeres de l'Hospitalet, que organiza por primera vez la Papanoelhada, que tendrá la forma de concentración en la avenida de Joan Carles I de esta localidad, dónde se invita a participar a los motoristas "disfrazados de Papá Noel", los cuales "aparcan la moto y entregan juguetes solidarios", que posteriormente serán repartidos a entidades sociales con destino a niños de familias vulnerables. Por eso Arroyo ha mostrado su sorpresa por el hecho de que el Síndic de Barcelona quiera prohibir una actividad de este tipo, "que, además, se hace en l'Hospitalet" y ha anunciado que se pondrán en contacto con la sindicatura para que "aclaren de qué organización están hablando".
Se desvinculan de conductas inapropiadas
Asimismo, las organizadoras recuerdan que la Papanoelhada Motera está prevista como acto estático, donde además de los motoristas y la recogida de regalos habrá muchas actividades para los niños, música y fiesta, entre las 13 y las 17.30 horas, y se desvinculan del hecho que, una vez acabada la concentración, "cuatro descerebrados" tengan conductas inapropiadas como las que les atribuye la sindicatura. "Si queman ruedas o se saltan semáforos, ya nos parece bien que los multen", indica la presidenta de la entidad organizadora, pero señala que una vez acabado el acto "quien quiera se puede quedar a desmontar, porque todo lo hacemos entre voluntarias".
Todavía más, Arroyo apunta que "los auténticos motards son supersolidarios" con respecto a llevar regalos, e indica que por megafonía se lanzarán avisos para evitar que una vez acabada la concentración estática haya episodios de conducción inapropiada, que es precisamente lo mismo que intenta evitar la Sindicatura de Greuges de Barcelona, que esta misma semana ha señalado que el paso de los motoristas ha supuesto "picos en torno a 85 dB a las horas donde transcurría el grueso de la manifestación", un resultado que superaba entre 10 y 15 dB el del domingo inmediatamente anterior. En todo caso, desde la Associació de Dones Sant Josep aseguran que "no hay ninguna rua o desfile prevista".