Ha hecho falta una semana, pero la placa de la calle dedicada a la escritora Ana María Matute ya luce sin incorrecciones una vez se ha enmendado la pifia que se reveló justo en el momento de descubrirla con motivo del cambio del nombre de la calle. El sábado 22 de enero se celebraba el acto de descubrimiento de la nueva placa con el que se consumaba el cambio de nombre de la antigua calle de Ramiro de Maeztu al de Ana María Matute Ausenjo. En presencia de la alcaldesa de Barcelona y vecinos de esta calle fronteriza entre los distritos de Horta-Guinardò y Gràcia se consumó un error inesperado.
En el momento de descubrir la placa se vio que la autora era definida como 'Escriptora i acadèmico', una palabra masculina en castellano, pero con el acento abierto del catalán. Desde el consistorio municipal lo atribuyeron a un error y prometieron cambiar la placa y volver a colgarla sin ninguna falta de ortografía. Este domingo, el concejal de Memoria Democrática del Ayuntamiento de Barcelona, Jordi Rabassa, ha difundido por redes sociales la placa con la corrección, dando así por cerrado el incidente que, a pesar de todo, ha dejado en evidencia que no se tuvo suficiente cuidado inicialmente a la hora de revisar la placa.
En el momento de oficializar el cambio de placa, Colau aseguró que el cambio de nombre era un paso más para "democratizar el nomenclátor", ya que todavía los nombres de mujeres no llegan ni al 8% de las calles, plazas y avenidas de la capital de Catalunya, debido a que tradicionalmente el nomenclátor "había priorizado los nombres de hombres privilegiados vinculados a la iglesia, la monarquía, el ejército o la aristocracia", y al mismo tiempo había olvidado "el papel de personajes populares o femeninos". Además, la alcaldesa recordó que Matute fue una autora "profundamente barcelonesa que dio a conocer la ciudad en el mundo". La nueva calle Ana María Matute Ausejo da así visibilidad a la ganadora de los premios literarios como el Premio Planeta, el Premi Nadal y el Premio nacional de las Letras Españolas, entre otros.
El cambio de nombre ha llegado casi un año después del acuerdo del Ayuntamiento de Barcelona para bautizar una calle con el nombre de Ana Maria Matute. La vía escogida fue la calle de Ramiro de Maeztu, una vía próxima al Park Güell que separa los distritos de Horta-Guinardó y Gràcia y que desde el año 1940 estaba dedicado al escritor y diplomático De Maeztu, que fue fusilado por milicianos republicanos al inicio de la Guerra Civil Española. El Ayuntamiento de Barcelona dio a conocer el 7 de marzo del 2021 la intención de cambiar este nombre dentro de una batería de cambios anunciados la víspera de la celebración del 8 de marzo, día de la Mujer, con el denominador de dar más nombres de mujer en las vías de la capital catalana. La calle que ahora lleva el nombre de Matute conecta la plaza Sanllehy con la carretera del Carmel y está vinculada a la escritora, ya que los últimos años residió en el barrio de Can Baró, cerca de la calle que ahora cambia de nombre.
Tres veces nominada al Nobel
Ana María Matute Ausejo (Barcelona, 26 de julio de 1925 – 25 de junio de 2014) fue una novelista catalana en lengua castellana y una de las voces más personales de la literatura española del siglo XX. Ganadora de varios galardones literarios como el Premio Planeta, el Premio Nacional de Crítica y Literatura, el Premio Nadal, el Premio Fastenrath de la Real Academia Española, el Premio Nacional de las Letras Españolas y el Premio Miguel de Cervantes; también fue nominada tres veces al premio Nobel de literatura. El cambio de nombre fue reconocido y aprobado por todas las partes implicadas en el ámbito histórico, social y municipal y pasará a formar parte del nomenclátor actual de la ciudad. Además, el vecindario tendrá a su disposición un documento acreditativo, que se podrá utilizar en caso de que les pidan un comprobante del cambio de dirección.
Otros cambios anunciados en marzo de 2021 fueron los que otorgarían calles a nombre de Margarita Rivière, Concepció Aleixandre, Anna Domènech, Elisa Moragas y Dolors Batlle, aunque de momento sólo se han efectuado algunos, como el que honra la maestra Elisa Moragas i Badia, que sustituye desde el mes de septiembre la anterior calle de los Reis Catòlics, situada en Vallvidrera (Sarrià-Sant Gervasi). Además, entre los cambios pendientes todavía hay el de la maestra Dolors Batlle i Sunyer, que sustituirá el nombre del militar y represor Enric Bargès en el distrito de Sants-Montjuïc.