El barrio de la Salut, situado en el distrito de Gràcia de Barcelona, sería un barrio residencial de uso y disfrute de sus vecinos como cualquier otro de la ciudad si no fuera porque se encuentra el Park Güell, una obra primordial de Antoni Gaudí, declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco y visitada cada día por miles de turistas. La saturación del barrio es un hecho palpable, con centenares de personas recorriendo sus empinadas calles, presencia continuada de taxistas cargando y descargando pasaje y autobuses del servicio regular llenos a tope hasta el punto que hace unos días el mismo Ayuntamiento de Barcelona optó por eliminar del servicio Google Maps toda referencia al bus de barrio 116, el más afectado por la situación.

Ahora bien, ocultar información de un autobús no deja de ser una medida excepcional para frenar la saturación y no un remedio estructural, y por eso mismo, este viernes el consistorio ha presentado un plan de choque con cinco medidas que se empezarán a activar bien pronto para poder ordenar los accesos al Park Güell y hacer más cómoda la vida de los residentes del barrio. Hay que tener en cuenta que el parque de Gaudí, a pesar de los cambios habidos los últimos años, es visitado por millones de personas al año y que a menudo, como este mismo viernes, muchas de las personas que llegan a él, se encuentran con que ya no quedan entradas.

Ampliación de la zona restringida para residentes

En este contexto, la primera teniente de alcaldía, Laia Bonet, ha presentado, en la misma entrada del parque, las cinco medidas previstas, que se irán poniendo en marcha las próximas semanas. La primera de ellas será la ampliación del área de acceso restringido a vecinos, con la instalación de un nuevo pilón en la esquina de las calles de Pare Jacint Alegre y del Escorial que impedirá a los vehículos acercarse a los accesos del Park y circular por el interior del barrio y solo se permitirá el paso a vecinos. Este pilón sustituirá el actual, situado en la calle de Marianao con rambla de Mercedes, de manera que el área restringida al tráfico se amplía notablemente.

Los residentes dispondrán de una tarjeta para poder acceder y el pilón dispondrá de un interfono para regular el acceso de los taxis que lleven o vayan a recoger vecinos y vecinas. Se prevé que este nuevo pilón esté instalado en un plazo de diez meses, según ha señalado la misma Bonet. El pilón se acompañará de señalización que indicará que solo podrán acceder los taxis que den servicio a residentes, de manera que los vehículos, tanto taxis como VTC, que lleven turistas no podrán acceder.

Eliminación de la parada de taxis de la rambla de Mercedes

Una segunda medida que se aplicará en unas semanas, será la eliminación de la parada de taxis de la rambla de Mercedes, la más próxima al acceso principal del Park Güell. Esta parada, de 8 plazas, es causa de numerosas quejas, molestias y problemas de convivencia y movilidad, y ahora quedará dentro del área restringida al tráfico. A cambio, la parada principal de taxis de la zona se situará en la carretera del Carmel, cerca de donde ya está el aparcamiento de autocares. La parada actual en la carretera del Carmel, que ahora dispone de 4 plazas, ampliará su capacidad hasta 12 plazas.


La reordenación de la parada de taxis en el barrio se completa con una nueva parada en la calle de la Mare de Déu de la Salut, donde se instalará una nueva de 4 plazas en la esquina con la calle del Escorial. Esta nueva parada quedará fuera del área restringida y alejada de la entrada del parque, y antes de que se instale, se llevarán a cabo los trabajos para poder aumentar la anchura de la calle. Según Bonet, esta parada está pensada "más para dar servicio a los vecinos del barrio que a los visitantes del Park Güell".

Más vehículos para las líneas 116, 24 y V19 de bus

Después de que la información del bus de barrio 116 ha sido eliminada de aplicaciones como Google Maps y similares, para reducir las 3.000 validaciones diarias, TMB reforzará esta línea con un vehículo más los sábados y festivos y también los laborables cuando se considere necesario. Asimismo, también se reforzará con un vehículo más tanto en sábado como en festivos, la línea 24, y con uno en sábado y con dos más los festivos, la línea V19. Estos incrementos, en todo caso, se reforzarán con más vehículos en verano y se modularán en función de la demanda y del efecto de las medidas implantadas. En las tres líneas se reforzará más la inspección y la presencia de vigilancia en los vehículos y se mejorará la señalización interior. De cara al verano, el refuerzo se incrementará los fines de semana con tres vehículos más del V19 y cinco más a disposición de las líneas V19 y 24 según las necesidades.

La información del bus de barrio 116 ha sido eliminada de Google Maps / Foto: Jordi Palmer

Más vigilancia contra los que no pagan billete

En paralelo al refuerzo de las líneas de autobús, Bonet ha anunciado también un refuerzo de la inspección y presencia de vigilantes en las tres líneas de autobús más afectadas, 116, 24 y V19, para evitar los actos "de indisciplina", en especial el hecho de que hay pasajeros que viajan sin billete o acceden por las puertas que son exclusivamente para bajar.

Venta de entradas exclusivamente por internet

Finalmente, una quinta medida afectará directamente a los visitantes del Park Güell, que a partir del 1 de julio solo podrán acceder al recinto con entradas compradas previamente por internet, ya que se dejarán de vender a las taquillas del mismo parque para favorecer las visitas programadas, generar un acceso escalonado y fluido en el parque y evitar así desplazamientos innecesarios e insatisfacciones por la falta de tickets disponibles.

Los vecinos ven con buenos ojos las medidas

El anuncio de este plan de choque ha sido recibido con optimismo por los vecinos de la Salud. Cira Martínez, miembro del colectivo Recuperem la Salut, ha expresado la satisfacción por las medidas anunciadas, pero ha señalado la necesidad "de ser cautelosos", a la espera de como se sustancian estas acciones.