Un año después de llegar a la alcaldía de Barcelona, Jaume Collboni ha presentado su plan para hacer frente al grave problema de acceso a la vivienda que sufre la capital de Catalunya, con unos precios del alquiler disparados y con jóvenes que se tienen que irse de la ciudad para poder emanciparse. El bautizado como Pla Viure incluye una medida que quiere ser de impacto y que implica recuperar los 10.000 pisos turísticos que hay en Barcelona en estos momentos y que en un margen de cuatro años, todos hayan pasado al mercado de alquiler o de venta para los vecinos de la ciudad, según ha explicado el alcalde Collboni en una rueda de prensa: "En 2029 habrá desaparecido la figura del piso turístico tal como hoy la concebimos", ha resumido.

Jaume Collboni, durante la presentación del Pla / Foto: Carlos Baglietto

Tal y como ha explicado Collboni, la idea del ayuntamiento es aplicar el Decreto aprobado por la Generalitat a finales de 2023 que regula las viviendas turísticas. Este decreto se convierte en una "gran oportunidad" para el ayuntamiento, para poder recuperar una altísima cifra de viviendas por el uso residencial. "Las 10.000 viviendas de uso turístico pierden su vigencia en noviembre de 2028 y cualquier voluntad debe ir sujeta a una licencia que no se podrá pedir, porque no existirá esta figura", ha detallado Laia Bonet, que también ha participado de esta rueda de prensa. La teniente de alcalde también ha destacado el trabajo realizado por el ayuntamiento para combatir los pisos turísticos ilegales durante los últimos meses. 

El decreto del Govern

El decreto del Govern al que se acoge el ayuntamiento tenía como voluntad poner freno a los apartamentos turísticos, no solo en Barcelona sino en el conjunto del país. Así, ponía un límite de cinco años a las licencias de pisos turísticos, que, por tanto, caducarán en noviembre del 2028. En ese momento, el Ejecutivo catalán defendía que existía una relación entre la disminución de oferta de alquiler y incremento de los pisos turísticos, asegurando que esta tendencia dificultaba "aún más el acceso de las personas y las familias a una vivienda habitual en un momento de crecimiento de la demanda de alquiler".

Modificaciones en la reserva del 30%


La de no renovar las licencias de los pisos turísticos y que, por tanto, estos desaparezcan de la ciudad en 2029 no es la única medida que incluye el Pla Viure presentado este viernes. También incorpora cambios en una de las medidas estrella de Ada Colau al frente del ayuntamiento, que era reservar el 30% de las nuevas promociones y grandes rehabilitaciones a vivienda protegida. "La reserva del 30% es una medida que nosotros avalamos, pero siempre hemos defendido que cuando tenemos una política pública que no consigue el objetivo hay que cambiarla para llegar a él", ha señalado, subrayando que desde su aprobación en 2018, solo se han otorgado licencias para 93 viviendas y de estas únicamente se han ejecutado 8, cifras muy alejadas de las previsiones iniciales.