El ciclo de Cine a la Fresca de Montjuïc excluye totalmente la lengua catalana. Una única película en catalán, Alcarràs, de las dieciséis que se proyectan y, además, los subtítulos son en castellano. Esta es la denuncia que ha hecho pública Plataforma per la Llengua y lamenta que esta omisión ya sea la norma de esta jornada cuando llega el verano: "La entidad considera que ya es habitual, desgraciadamente, que Sala Montjuïc excluya la lengua propia del territorio en las proyecciones, pero lamenta que en la edición de este año la presencia del catalán no sólo se haya reducido a una sola película, sino que la lengua escogida para los subtítulos tampoco no haya sido el catalán". Precisamente, Colau anunció la semana pasada que la pregonera de la Mercè será Simón, quién siempre ha defendido el éxito de hacer cine en catalán hasta llegar a ganar el Oso de Oro en el festival de Berlín el pasado mes de febrero.

La Plataforma per la Llengua también lamenta otra incongruencia: "En este sentido, todos los filmes se han programado en versión original subtitulada en castellano y el único filme que se ha emitido en castellano, Relatos salvajes, contiene los subtítulos en inglés, y no en catalán". Así pues, aparte de la película de Carla Simón, también constatan cómo se ha dado prioridad a los subtítulos en inglés, una lengua extranjera en nuestra casa, antes que el catalán cuando la película en versión original ha sido en castellano, Relatos Salvajes del director argentino Damián David Szifron. Sobre este aspecto, recuerdan que "la voluntad de llegar a los turistas internacionales con películas mayoritariamente en la versión original en inglés no justifica renunciar a la lengua propia del territorio, incluso en los subtítulos".

Captura de twitter Plataforma per la Llengua

El Ayuntamiento de Barcelona no subvenciona cine en catalán

La entidad también recuerda que la financiación del Cine a la Fresca de Montjuïc, organizado por Sala Montjuïc, viene derivada de la subvención del Ayuntamiento de Barcelona, al frente su alcaldesa Ada Colau. En la misma página web, aparece el apoyo público del consistorio, pero también de marcas privadas y medios de comunicación públicos y privados. Desde el consistorio, de momento, todavía no se han pronunciado. A pesar de todo, esta no es la primera polémica que vive el actual gobierno de Ada Colau por la falta de sensibilidad con la lengua catalana.

La Plataforma per la Llengua también denuncia otro ciclo subvencionado que hace caso omiso al catalán: "El ciclo de cine a la fresca Grades abiertas en el Canódromo, organizado por el Canódromo y por el Distrito de Sant Andreu del Ayuntamiento de Barcelona, también ha excluido el catalán de la mayor parte de la programación de la edición de este año. De los cuatro filmes programados, Alcarràs es otra vez el único que se proyecta en catalán, y de los otros tres, hay dos (Distrito 9 y Nausicaä de la Vall del Vent) que tienen versión doblada y subtitulada en catalán, pero que se han programado prescindiendo de la lengua propia".

Ahora, la entidad pide a la concejalía de Cultura que obligue a los ciclos de cine que financia, garantizar como mínimo un 50% de proyecciones en catalán, tanto en versión original como subtitulada, y que exhiba la versión en catalán siempre que exista. Plataforma per la Llengua también apela al Ayuntamiento a instaurar una concejalía de política lingüística que vele por promover la normalización lingüística de manera transversal. Y recuerda que otros municipios han tomado nota de las reivindicaciones. En el caso de las proyecciones de Castelldefels, la presión de la entidad ha conseguido que los organizadores ya programen la mitad de las películas en catalán.

Otros ejemplos de omisión del catalán

Más allá del cine, los ejemplos de Colau con la nula representatividad del catalán se hacen palpables en otros ámbitos. En la final azulgrana de la Champions femenina del pasado mes de mayo, el Ayuntamiento de Barcelona instaló una pantalla en la plaza de Catalunya, y se escuchó la narración del partido exclusivamente en castellano. Miles de personas siguieron el partido en el centro de la capital catalana y ante el hecho de que la retransmisión se hizo en castellano, las redes sociales se inundaron rápidamente de comentarios criticando el gobierno de la alcaldesa Ada Colau por la decisión de no emitir el partido con una narración en catalán, teniendo en cuenta que TV3 retransmitía el partido en esta lengua. También en el 2020, ignoró la lengua catalana e instaló semáforos con la imagen "Pulse el botón" y "Espere verde" en castellano, vulnerando incluso, la normativa actual.