El Ayuntamiento de Barcelona ha precintado por riesgo de hundimiento la Torre de Mas Enrich o Torre del Moro, una torre de planta cuadrada que ha sobrevivido hasta nuestros días como último vestigio del antiguo Mas Enrich, una masía del siglo XVI situada en lo que hoy es la plaza de Ciutadella de Horta, justo al lado del actual parque de las Rieres. Abandonada desde hace años, actualmente era utilizada sólo como almacén de chatarra por parte de un grupo de recogedores, que también guardaban sus objetos personales. Según ha adelantado 'betevé', el pasado día 18 de octubre una inspección municipal detectó riesgo inminente de hundimiento por el mal estado del techo y las paredes y decidió precintar el edificio y prohibir la entrada.
De hecho, siempre según la televisión pública de Barcelona, el grupo de 15 subsaharianos que habitualmente hacían uso del espacio para almacenar chatarra tenía que entrar el lunes por la mañana a recoger sus objetos personales pero los Bomberos de Barcelona finalmente lo desaconsejaron hasta que no se apuntale el interior de la torre. En el inmueble, en muy mal estado a pesar de su pasado señorial, no vivía nadie. Ahora, sus usuarios reclaman tener acceso a algún otro espacio para poder almacenar chatarra.
Construcción protegida
La Torre del Moro está catalogada como Bien Cultural de Interés Local (BCIL) del municipio de Barcelona y conserva dos ventanas góticas, de la que destacan en el primer piso las cabezas de un hombre y una mujer con turbantes, de donde le viene el nombre de Torre del Moro.
Con todo, sus propietarios hace décadas que no cuidan del edificio, que actualmente amenaza con hundirse a causa de la falta de mantenimiento a lo largo de los años. Por eso, según indica betevé, los vecinos hace años que reclaman la expropiación por parte del Ayuntamiento de Barcelona con el propósito que se pueda restaurar y conservar como patrimonio histórico de Horta. De hecho, la Asociación de Vecinos de Horta ya reclamó en febrero de este año la necesidad de actuar de manera urgente en este inmueble.
El edificio, que durante una años va llegar a ser sede del Partido de los Comunistas de Catalunya (PCC) y también casa okupada se ha ido degradando con el paso de los años hasta llegar a su uso actual, utilizado sólo para almacenar chatarra.
Otro golpe al patrimonio de Horta
La posibilidad de que se hunda la Torre del Moro supondría otro golpe al patrimonio histórico de Horta, que ya resultó debilitado por el derribo de algunos inmuebles de la isla de las lavanderas de Horta, un hecho que provocó quejas en todo el distrito.
La isla de las Bugaderes de Horta está delimitado por las calles Granollers, Baixada de can Mateu, Llobregós y plaza de las Bogaderes d'Horta y en medio está la calle Aiguafreda, un lugar donde el tiempo parece haberse detenido en aquellos tiempos cuando las mujeres del barrio se encargaban de hacer la colada de las casas acomodadas de Barcelona. Las casas que todavía permanecen tienen lavadero, pozo y pequeños huertos. Todo ello, "un conjunto de alto valor histórico, tradicional y ecológico surgido a mediados del siglo XIX, que ha llegado a día de hoy prácticamente intacto," según indica en un comunicado Salvem l'Illa de les Bugaderes d'Horta, plataforma creada expresamente para evitar que desaparezca.